Los comedores populares son una parte clave dentro de la lucha contra la pandemia del coronavirus y las restricciones, ya que dentro de sus instalaciones, reciben día a día a muchísimas familias que debieron volcarse allí, por este motivo, el gran pendiente dentro del plan de vacunación contra el coronavirus es la inmunización de sus trabajadores. 

Dentro de estos espacios, los trabajadores y voluntarios funcionan como contención en los barrios más humildes de todo el país y dan apoyo a quienes no han podido mantener en pie su trabajo durante el cierre total de actividades económicas.

Por este motivo, los trabajadores de los comedores y merenderos solicitaron preponderar la vacunación de los trabajadores y voluntarios de los espacios populares como trabajadores esenciales.

Los movimientos sociales que acompañan este reclamo, encabezados por el Movimiento Evita, remarcan que la cartera sanitaria se comprometió a garantizar el acceso a la salud de todos los ciudadanos y que eso incluye, por supuesto, a los voluntarios y trabajadores de los comedores y merenderos de los barrios populares de todo el país. 

“Las trabajadoras sociocomunitarias son esenciales y deben ser vacunadas, por su propia protección y porque están en contacto con cientos de personas y podrían disparar contagios masivos de coronavirus”, indicaron las organizaciones sociales mediante un comunicado.

 

Avance en las negociaciones

Los espacios que más han avanzado en las negociaciones son la provincia de Misiones y la Ciudad de Buenos Aires.  En este sentido, la cartera conducida por Fernán Quirós informó que esta campaña se reanudará cuando las dosis correctas sean asignadas para poder comenzar con las inmunizaciones a la población, de manera que la espera podría extenderse de dos a tres semanas más. 

Sin embargo, el proyecto de ley para inocular a los trabajadores de los comedores fue puesto en agenda del Ejecutivo por la diputada del Frente de Todos y miembro del Movimiento Evita, Laura Velasco, cuya presentación obtuvo la aprobación de todos los votos de ambos bloques. “Nosotros planteamos que además de las y los cocineros, también deben ser vacunadas las promotoras de salud, las compañeras que acercan el bolsón de alimentos a las familias que están en aisladas, las que dan apoyo en escolar a los chicos que no tienen computadoras, las trabajadoras de las áreas de género y diversidad”, aseguró.

Por su parte, el ministro de Desarrollo Social, Daniel Arroyo, mostró su apoyo al reclamo de los comedores populares y manifestó que al menos 70 mil vacunas deben ser destinadas a ellos, ya que son considerados por el Ejecutivo como parte del personal esencial que contempla el Gobierno Nacional.