Papa Francisco y el presidente Donald Trump podrían tener su primera reunión a finales de mayo, en un encuentro entre dos de las figuras públicas más importantes, según la información del vaticanista Christopher Lamb. 

Fuentes diplomáticas indicaron que el presidente de los Estados Unidos podría ver al Papa cuando viaje a Italia para la reunión del G7, en Sicilia. La Casa Blanca confirmó ayer que Trump participará en la cumbre. 

Los dos predecesores de Trump se reunieron con el Papa por primera vez cuando viajaron a Italia para las cumbres del G8: así fue como Barack Obama se encontró con Benedicto XVI en 2009 y George W. Bush con Juan Pablo II en 2001. 

La Santa Sede no ha comentado nada sobre una posible reunión, pero fuentes vaticanas indican que la reunión del G7 en Taormina (26 y 27 de mayo) puede ser una posibilidad para que Francisco reciba a Trump. 

«Esta visita le da al presidente una oportunidad para reunirse con el Papa», explicó una fuente diplomática. «Y, si viene a Italia sin ver a Francisco, sería interpretado como un “snob”, sobre todo teniendo en cuenta sus anteriores choques en relación con la migración. Trump también considera que no es sabio atacar el Papado sin importar desde cuál espectro político lo hagas». 

Como sea, se puede anticipar un encuentro de tensión política debido a las diferencias entre Francisco, que pide un orden global compasivo en el mundo, y Trump que ha adoptado el tono nacionalista resumido en el eslogan: «América primero».