La Federación Israelita de Sao Paulo (FISEP), organización que representa a la comunidad hebrea en el estado más poblado de Brasil, manifestó su repudio a la anunciada visita al mayor país de América Latina de un clérigo iraquí conocido por llamar en sus sermones a la destrucción del Estado de Israel.
La entidad manifestó su “vehemente repudio a la visita que hará a Sao Paulo el ayatollah chií iraquí Mohsen Araki, que en sus sermones proclama la destrucción del Estado de Israel”.
El clérigo es secretario general de la Unión Internacional para el Acercamiento de los Musulmanes y, pese a su nacionalidad iraquí, tiene estrechos vínculos con el régimen iraní, especialmente con el Líder Supremo de Irán, el ayatollah Ali Khamenei y con el grupo terrorista libanés chií Hezbolllah.
Araki tiene previsto participar en los próximos días en una serie de conferencias en mezquitas e instituciones patrocinadas por el gobierno de Irán en Brasil y curiosamente pronunciará el sábado 29 de julio una conferencia en el Novotel Center Norte de Sao Paulo sobre “Los musulmanes y el enfrentamiento al terrorismo radical”.
El clérigo calificó a Israel como “un cáncer que tiene que ser extirpado de Oriente Medio” tras un reciente encuentro que tuvo con el cabecilla de Hezbollah, jeque Hassan Nasrallah.
La FISEP considera contradictorio que un clérigo con “estrechas relaciones con Hezbollah” se pronuncie en Brasil sobre el “enfrentamiento al terrorismo y al radicalismo”.
“No podemos permitir que manifestaciones peligrosas de discriminación, destrucción e ira sean sembradas en nuestro país, y que se importe un conflicto que no queremos ver en nuestra tierra”, afirmó el presidente de la FISEP, Bruno Laskowsky.
La organización agregó que, en asociación con la Confederación Israelita de Brasil (CONIB), está adoptando las medidas necesarias para “concienciar a las autoridades brasileñas de la situación”.
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