El gobierno de Gran Bretaña adoptará una definición oficial de "antisemitismo" a fin de identificar y combatir mejor los delitos y ataques contra la comunidad judía. El anuncio será realizada por la primera ministra, Theresa May, en una reunión en la que resaltará que el Estado de Israel garantiza "los derechos de las personas de todas las religiones, razas y orientaciones sexuales".
El Reino Unido adoptará la definición propuesta por la Alianza Internacional para el Recuerdo del Holocausto que afirma que "el antisemitismo es una determinada percepción de los judíos, que puede ser expresada como odio hacia los judíos".
"La manifestación retórica y física de antisemitismo está dirigida hacia individuos judíos o no judíos y/o sus bienes, hacia instituciones de la comunidad judía e instalaciones religiosas", se añade.
La Policía británica ya maneja esta definición, pero la intención del Gobierno de Londres es que se extienda también a ayuntamientos, universidades y otros organismos públicos.
El Partido Laborista, primero de la oposición, ha declarado que está de acuerdo con la definición propuesta.
"(El líder) Jeremy Corbyn y el Partido Laborista son de la opinión que el lenguaje y el comportamiento que proyectan odio hacia los judíos es antisemitismo, y es tan repugnante como cualquier otra forma de racismo", expresaron en un comunicado.
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