La delegación estuvo integrada por el presidente, Abraham Duvdevani; el director ejecutivo, Eli Cohen; y los titulares de los tres departamentos que tienen relación directa con las federaciones sionistas latinoamericanas: el rabino Yejiel Wasserman, de Asuntos Religiosos para la Diáspora; Gusti Yehoshua Braverman, de Actividades Sionistas para la Diáspora; y Marina Rozenberg-Koritny, de Promoción de la Aliá.

"Por primera vez en la Argentina dimos un premio a mujeres que incentivan la aliá; el acto fue muy emocionante", contó esta última a Itongadol.

"En el departamento que lidero trabajamos bajo la idea de que antes, el pueblo judío necesitaba un Estado y hoy, el Estado necesita al pueblo", resumió.

"En Israel vive hoy el 48 por ciento del total del pueblo judío, es decir que un 52 por ciento permanece disperso en la Diáspora y lo que hacemos es convencer a los potenciales olim de hacer aliá, a través de actividades, nuestro ulpán (centro de estudio acelerado de hebreo) y la hasbará (diplomacia pública)", precisó quien inmigró desde Kazajistán en 1995.

Rozenberg-Koritny (foto), quien tiene una maestría en Educación Física y otra en Comportamiento Organizacional en la Universidad Politécnica de Nueva York, pasó de ser maestra de escuela a concejal a cargo del desarrollo turístico de Beer Sheva, y luego fue asesora del ministro nacional de esa área y titular del Departamento de Información de esa cartera.

- Trabajo en los Estados Unidos, Canadá, Europa y América Latina, en la Argentina, Brasil y empezamos en Chile. Es claro que cada país tiene lo suyo. En la Argentina hay cambios: estuvimos en escuelas y en nuestros ulpanim y veo que la gente se interesa mucho en lo que pasa en Israel. Por lo que entendí, no siempre tienen la información cierta de lo que sucede allí. Me sorprendió que haya periodistas que entiendan hebreo y traduzcan notas de medios israelíes, a diferencia de analistas locales que difunden informaciones que no siempre juegan para los intereses de Israel. Me resultó muy interesante hablar con jóvenes, y había gente que se prepara para hacer aliá. Uno quiere estudiar Medicina, entonces hizo preguntas prácticas. Entendí que mucha gente le tiene miedo al cambio, más allá de que estén bien o no. No hay que ver los cambios como una dificultad porque cada cosa que hacemos es difícil. Intento explicar que la aliá hay que verla como una oportunidad. Si sabes que allá te va a ir mejor, entonces te irá mejor. A cada candidato tratamos de darle todas las herramientas para ayudarlo y prepararlo para la aliá. Le explicamos sus posibilidades en el país, en qué ciudades se necesita gente de tal oficio y lo ayudamos con el idioma, que es fundamental. Es importante que entiendan que pueden empezar a estudiar en su país de origen. Empezar en Israel es muy difícil: vivís en un lugar donde nada entendés y lo hacés bajo presión. Es mejor que empezar antes.

- ¿Es una nueva etapa en relación con la aliá?

- La Organización Sionista (Mundial) existe desde 1897. Es la institución que creó Theodor Herzl. Durante muchos años estuvo junto con la Sojnut (Agencia Judía para Israel) y en un momento se separaron. Hay entidades que trabajan con un mismo objetivo y la OSM es como un paraguas de todas las instituciones. La ideología sionista se basa en tres pilares fundamentales: aliá, seguridad y población. Con la Sojnut trabajamos en conjunto, y también el Gobierno se ocupa de la aliá, a través del Ministerio de Absorción. Hay muchas otras instituciones que se ocupan de esto, pero lo hacemos en conjunto, por el bien del objetivo. El 10 por ciento de nuestros alumnos ya hicieron aliá. Todo el tiempo chequeamos sobre qué sector debemos trabajar. Hicimos una investigación con el Ministerio de Absorción y entendimos que el factor determinante en la familia es la mujer: si ésta quiere, la familia hace aliá. Los 120 primeros años del sionismo hicimos algo muy grande: construimos el Estado de Israel. Es el único país donde no sos un inmigrante, sino un hermano. Allá vas a tener todo. Israel espera a los olim y los apoya. Sepan que tienen la oportunidad y el derecho a hacer aliá.