El candidato a presidente de Chile dijo que “con la comunidad judía me llevo muy bien. Con la sionista tengo ciertos problemas”.

El alcalde de Recoleta expresó esa frase en una entrevista en el diario El Mercurio el día domingo.

El presidente de la Organización Sionista Argentina, Sergio Pikholtz, manifestó su opinión tras las declaraciones de Daniel Jadue.

No es la primera vez que el dirigente del partido comunista chileno y actual alcalde de Recoleta manifiesta públicamente su judeofobia en la figura del antisionismo.

Son recurrentes en Jadue las apelaciones a las conspiraciones judeosionistas en los medios de comunicación o la banca por ejemplo.

A su vez, intenta explicar que sus problemas nada tienen que ver con los judíos sino con los sionistas.

En ese contexto, el político comunista, que también es activo dirigente de la comunidad palestina de Chile, adhirió y firmó una resolución. Allí expresa su apoyo al movimiento de Boicot, Desinversión y Sanciones (BDS) contra Israel. También afirma que el Pueblo palestino hapsido víctima del terror y la violencia de bandas sionistas armadas.

Resulta ocioso a esta altura de la historia explicar que antiisraelismo y antisionismo son lo mismo que antisemitismo. Que sujetos como Jadue, que no son otra cosa que odiadores seriales de judíos, viven con vergüenza ese odio. Prefieren manifestar su desprecio al judío de los países: Israel, y al movimiento nacional de liberación del pueblo judío: el sionismo.

Dentro del ecosistema judeofóbico de habla hispana es interesante observar que Jadue es habitualmente etiquetado en las publicaciones de Twitter del también chileno Rafael Amaya Masry, presidente de la Confederación Palestina Latinoamericana y del Caribe (COPLAC) y Diputado Miembro del Consejo Nac. Palestino. Esos dos sujetos se siguen mutuamente y comparten material en las redes sociales.

Masry en sus posteos, y haciendo gala de una prosa pseudo intelectual, sostiene un mensaje antisionista y antiisraelí similar al del alcalde. Además, intenta argumentar que no es antisemita.

El Tweet fijado en su perfil es por demás elocuente. Cabe aclarar que Masry es seguido por 55000 usuarios en Twitter, muchos menos que Jadue, a quien siguen 525 mil.