La provincia de Buenos Aires no escapa a la dura crisis financiera que vive el país y así lo hizo saber el último reporte de Moody´s. En definitiva, la calificadora de riesgos puso la lupa sobre las arcas bonaerenses y alertó que se encuentra al borde de un default. Claro está, la firma internacional apuntala sus afirmaciones en la deuda provincial y los vencimientos venideros para la gestión hoy de María Eugenia Vidal.

“La provincia de Buenos Aires afronta desafíos significativos para lo que resta de 2019 y 2020 debido a su elevada exposición a deuda en moneda extranjera, un perfil de vencimientos desafiante y una base económica debilitada en medio de mayores riesgos sistémicos por parte del Gobierno de Argentina”, sostuvo el informe de Moody's que se conoció el último martes.

En ese sentido, remarcó que "en 2015, comenzó a emitir en el exterior notas en los mercados de capitales internacionales. Desde entonces, la proporción de la deuda en moneda extranjera con la deuda total ha aumentado al 80% en 2018 desde 60% en 2015. Cualquier volatilidad adicional de la moneda extranjera aumentará sustancialmente el apalancamiento de la Provincia, que recibe ingresos en el mercado local”. Es decir, la lupa puesta en el endeudamiento en dólares con pagos “significativos” que deben cumplirse en el período 2019-2020 “lo que aumenta aún más su riesgo de default”.

El informe de la firma con sede en New York puso en el centro del debate a uno de los puntales de la campaña electoral con la puja por el Sillón de Dardo Rocha como objetivo central. Por caso, el candidato a gobernador de Todos, Axel Kicillof, alertó en más de una oportunidad sobre el escenario a futuro y las problemáticas para enfrentar los pagos a tiempo ante la ausencia de liquidez. Moody´s, prácticamente, brindó un pase gol para el hombre que en las PASO aventajó por 18 puntos a Vidal. Sin embargo, el estudio arroja más que una herramienta comicial y pone en evidencia un horizonte complicado para las finanzas bonaerense.

Incluso, la posibilidad de la emisión de una cuasi moneda ingresó en el debate público. Sin embargo, el director del Centro de Economía Política Argentina (CEPA), Hernán Letcher, eliminó de llano esa posibilidad: “No creo que se le ocurra imprimir cuasi moneda pero no se como van a hacer para cerrar el financiamiento”, dijo a LaTecla.info.

Vale remarcar que, ante la consulta realizada por este medio a la gestión provincial producto del informe de Moody´s, optaron por el silencio y no emitir declaraciones al respecto.

Así, ante el silencio oficial, el titular de CEPA remarcó que “Lo de Moody´s deja en claro el escenario malo de la provincia. La realidad es que la provincia debe de acá a fin de año unos 70 mil millones de pesos y no los tiene”. De esa manera, consideró que en la búsqueda por saldar los pagos los caminos posibles oscilan entre la incrementación de la “deuda flotante, patear vencimientos o quizás intentar endeudarse con el Anses”.

“La otra opción es que Nación le de una mano, pero no da la impresión de que estén en condiciones ni los veo interesados en hacerlo. Es un escenario complicado”, sentenció Letcher.

Asimismo, Verónica Sosa, marcada por sus propios colegas como “la economista que más sabe de provincias”, remarcó a este medio que la posibilidad de ingresar en un default es más que certera. “La posibilidad está siempre y cuando el mercado de deuda siga cerrado para la Provincia”, detalló y agregó: “si se llega a abrir una ventana de alguna manera puede ir refinanciando los intereses. La posibilidad de que suceda (el default) es alta”.

Al igual que Letcher, Sosa descartó la posibilidad de una “cuasi moneda” y subrayó que “no es necesario para nada, el Banco Central sigue emitiendo pesos. Las cuasi moneda surgieron en una convertibilidad donde el BCRA no podían emitir pesos”.

De esa manera, la titular de Economía y Regiones, remarcó que “de suceder algún elemento más complejo sería recién en 2020, la jurisdicción de acá a diciembre podría llegar a refinanciarse mediante la colocación de algún bono en organismo público superavitario, que es algo que ya hizo la Provincia con la Anses hace un par de años”. En esa línea, destacó que “eso es factible, en pos de no llegar a un default de deuda”, y reforzó: “el mayor riesgo aparece en 2020 con una nueva gestión, pensando en mayores restricciones cambiarias que pueden complicar el giro de divisas al exterior y allí evidentemente habría que darle algún tipo de solución a una provincia que necesita cumplir con los compromisos”.

Por su parte, el economista Orlando Ferreres bajó la temperatura en la discusión y aseguró que “la Provincia debe unos 11.000 millones de dólares, lo que no es mucho para el PBI provincial”. Así, señaló que “el tema puede ser en cuanto al momento en que hay que pagar que puede estar muy concentrado al principio”.

En definitiva, el estudio de Moody´s puso la luz de alerta sobre las finanzas de la provincia de Buenos Aires y el duro desafío a futuro por cumplir con los compromisos asumidos.

La voz de Kicillof

El candidato a gobernador de Todos, Axel Kicillof, apuntó en varias oportunidades al endeudamiento bonaerense. Inclusive, sus dichos sobre la dolarización de la deuda sirvieron como el inicio de uno de los primeros cruces que mantuvo con la gobernadora María Eugenia Vidal después de las PASO.

En ese sentido, el informe de Moody´s fue materia de análisis del ex ministro de Economía que si bien no dio declaraciones a los medios, utilizó sus redes sociales para referirse al tema.

“La calificadora de riesgo Moody's publicó un lapidario informe en el que expone la espantosa situación financiera de la Provincia. Gobernadora, ¿por qué en lugar de dedicar tiempo a la campaña sucia no explica qué está haciendo para resolver los problemas que su gobierno creó?”, lanzó el actual diputado.

Y agregó: “Para que quede claro: la gestión de la gobernadora Vidal sobreendeudó a la provincia (+USD 3.828 M de deuda en moneda extranjera), lo hizo en dólares (pasó del 57% al 82%), y los vencimientos son en el próximo mandato (USD 9.000 M en los próximos 4 años). Además las cuentas provinciales no cierran: según pudimos estimar faltan entre $50 mil y $80 mil millones para terminar el año. Y no se arregla descapitalizando al Banco Provincia”.

“Tal vez por estas razones necesitan la campaña sucia. Para que no se hable de la desastrosa gestión que hicieron en la Provincia”, cerró Kicillof en su Twitter.