Obispos argentinos y chilenos invitaron al Papa a visitar la Patagonia

Obispos argentinos y chilenos invitaron al Papa a visitar la Patagonia

Los prelados argentinos y chilenos que participaron del V Encuentro de Obispos de la Patagonia Argentina y de la Patagonia y el Sur de Chile invitaron al papa Francisco a que visite esta región en su futuro viaje a Sudamérica, previsto para 2017. Las jornadas se realizaron los días 19, 20 y 21 de abril, en la ciudad de Junín de los Andes, jurisdicción de la diócesis argentina del Neuquén, tierra en la que se venera a los beatos Laura Vicuña y Ceferino Namuncurá.

Convocados por el obispo de Neuquén, monseñor Virginio Bressanelli SCJ acudieron prelados de los dos países: Marcelo Cuenca (Alto Valle del Río Negro), Esteban Laxague SDB (Viedma), Juan José Chaparro CMF (San Carlos de Bariloche), José Slaby CSSR (Esquel), Joaquín Gimeno Lahoz y el auxiliar Fernando Croxatto (Comodoro Rivadavia), Miguel Ángel D’ Annibale (Río Gallegos) y los obispos eméritos Marcelo Melani SDB (Neuquén) y Fernando Bargalló (Merlo-Moreno). 

En representación de las diócesis patagónicas chilenas estuvieron los obispos Héctor Vargas SDB (Temuco), Francisco Javier Stegmaier (Villarrica), Ignacio Ducasse (Valdivia), Juan Barros (Osorno), Cristian Caro (Puerto Montt), Luis Infanti OSM (vicario apostólico de Aysén) y Bernardo Bastres SDB (Punta Arenas). El único ausente fue el obispo de Ancud, monseñor Juan Agurto OSM. 

En Junín de los Andes, Provincia del Neuquen, se reunieron desde el martes 19 al jueves 21 de abril de 2016, 7 obispos de la Patagonia y Sur de Chile con 10 obispos de la Región Patagonia - Comahue de la Argentina (Ver Datos). 

El encuentro tuvo como objetivo acrecentar vínculos, tratar temas en común y hacer realidad la colegialidad episcopal en estas regiones del fin del mundo. El tema del encuentro fue el Año de la Misericordia y se desarrolló en varias etapas. 

Monseñor Chaparro detalló que en la tarde del martes 19 se realizó la presentación de los participantes y cada obispo compartió “algo que le estaba alegrando, doliendo o preocupando en la Iglesia particular que se le ha confiado de la región o país al que pertenece”. 

“Fue un momento muy enriquecedor que permitió un mayor conocimiento de los participantes. La misa de ese día se compartió con las comunidades de las capillas San Cayetano y Sagrado Corazón de la ciudad, dividiéndose en dos grupos de obispos, uno para cada lugar. Luego de la cena se invitó a participar del encuentro a Juan Grabois, quien disertó en una charla muy amena sobre los Movimientos Populares. 

Durante la mañana del martes 20 los obispos compartieron ecos y resonancias a nivel personal de la bula Misericordiae vultus, reconociendo la riqueza que este documento del papa Francisco para convocar al Año de la Misericordia. A media mañana, los obispos visitaron el Vía Christi, parque temático de la ciudad, acompañados por su autor, el arquitecto Alejandro Santana. “Fue un momento muy precioso, donde a través del arte y la escultura se pudo recorrer la vida del Señor insertada en la cultura del lugar”, destacó monseñor Chaparro. 

Por la tarde se compartió las acciones pastorales que por el Año de la Misericordia se están realizando en las diversas diócesis. La misa de ese día se celebró en la parroquia y santuario Nuestra Señora de las Nieves y Laura Vicuña. Antes de la celebración se brindó a los obispos una explicación del sentido de los signos presentes en el templo. 

Luego de la cena se realizó una evaluación del encuentro. Se valoró el clima de fraternidad y la apertura que se tuvo por parte de los participantes en los temas y situaciones planteadas. Se fijó para dentro de dos años la fecha del próximo encuentro en Chile, salvo que el papa Francisco visite alguno de los dos países en 2018, para lo cual el encuentro se haría dentro de tres años. 

El miércoles 21 los obispos se dirigieron en peregrinación a San Ignacio, a 60 km de la ciudad, y celebraron la misa en el Kultrum donde reposan los restos del beato Ceferino Namuncurá, con la participación de la comunidad mapuche del lugar. Allí monseñor Laxague, presidió la celebración eucarística y leyó una carta de Ceferino a su padre, escrita pocos días antes de su muerte. 

El Concejo Deliberante de Junín de los Andes declaró de interés municipal el encuentro binacional de los obispos patagónicos.

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