Un Mercosur en crisis

Un Mercosur en crisis

La Cancillería venezolana emitió una declaración asumiéndose en la presidencia del Mercosur, cuestión que rechazan Argentina, Brasil y Paraguay. Criticó al gobierno de Macri y el “de facto” de Brasil.

El gobierno de Venezuela rechazó en duros términos las “amenazas y agresiones” de los presidentes de Argentina, Mauricio Macri, y de Brasil, Michel Temer, sobre su permanencia en el Mercado Común del Sur (Mercosur).

La Cancillería venezolana emitió una declaración asumiéndose al frente de la presidencia pro témpore del Mercosur, cuestión que rechaza Argentina, Brasil y Paraguay. Señaló que en ejercicio legítimo de la presidencia pro témpore de Mercosur, Venezuela rechaza las amenazas y agresiones proferidas por el presidente de Argentina, Mauricio Macri, y del presidente “de facto” de Brasil, Michel Temer, quienes persisten en su acción para implosionar y destruir el bloque de integración.

“La Triple Alianza, conformada por los gobiernos de Argentina, Paraguay y de facto de Brasil, atenta contra la estabilidad de este bloque de integración económica, comercial y social, desestima y vulnera las potencialidades productivas de nuestros países, destruyendo las matrices sociolaborales de sus trabajadores, y afecta la proyección de este bloque en los mercados internacionales”, sentenció el Ejecutivo venezolano.

Asimismo, rechazó las exigencias de Argentina y Brasil para que Venezuela asuma los tratados que le permitan ser considerado miembro pleno. La declaración recalcó que Venezuela incorporó el acervo normativo de Mercosur con mucha mayor eficacia y eficiencia, en apenas cuatro años, que lo arrojado por los demás países durante 25 años desde su fundación. “La intolerancia política e ideológica de estos gobiernos de derecha pretende atacar a la revolución bolivariana, a su gobierno y a su pueblo, para justificar mediante artimañas antijurídicas su proceder antidemocrático destructivo”, subrayó.

Agregó además que la presidencia pro témpore de Mercosur exige respeto al gobierno de facto de Brasil y al argentino, para que ajusten su comportamiento al estricto apego de los tratados fundacionales de este organismo regional, así como al desarrollo histórico de los pueblos.

Macri y Temer se reunieron el lunes en Buenos Aires, donde expresaron su “preocupación por la violación” de los derechos humanos en Venezuela e instaron a su mandatario, Nicolás Maduro, a cumplir los requisitos necesarios para mantener su condición de miembro del Mercosur. Coincidieron en que Argentina y Brasil deben contribuir a fortalecer el Mercosur y en ser inflexibles con los pasos legales que debe dar Venezuela si quiere integrarse como miembro pleno a ese espacio.

Macri, tras reunirse con Temer en Olivos, afirmó: “Argentina y Brasil, en el marco de la globalización que hay en estos tiempos, comparten una agenda ambiciosa de cara al futuro y también el objetivo de potenciar y ampliar la relación comercial en el Mercosur. Estamos muy cerca del Brasil, más allá de la rivalidad futbolística”, definió el presidente argentino en clave futbolera. Temer, por su parte, remarcó que éste era su primer viaje a un país de Latinoamérica y era precisamente a Argentina, recordó los lazos históricos que unen a ambos países y dejó en claro que entre él y Macri hay una identidad de posiciones. Por eso, habló de fortalecer el Mercosur y dijo: “Hay una construcción de unidad con el resto de países integrantes del bloque”.

Respecto de Venezuela, tanto Macri como Temer fueron inflexibles en que ese país debe cumplir con todos los pasos formales que no cumplió hasta ahora para la integración definitiva, explicó el presidente de Brasil. Macri, por su parte, recordó que a Venezuela le han dado un plazo en ese sentido y enfatizó que su preocupación prioritaria con el país caribeño es acerca de la falta de cumplimiento por parte del gobierno de Venezuela de cosas como el referéndum revocatorio. Temer, a su vez, expresó su preocupación por las faltas a los derechos políticos y humanos en esa nación. Mientras que Macri insistió: “El camino de integrarnos al mundo es desde el Mercosur y ese es el camino que hay que recorrer”.

La polémica surgió cuando Uruguay finalizó la presidencia pro témpore, y era el turno de Venezuela de estar al mando, como indica el reglamento del bloque, cuya presidencia es rotatoria y se accede a ella por orden alfabético. Paraguay fue el primer país en oponerse, y luego continuaron Argentina y Brasil, quienes niegan que Caracas, inmersa en una profunda crisis política y económica, dirija el Mercosur.

Comentá la nota