La cuarentena por coronavirus disminuye actividades como pocas veces en la historia, y aunque solo los servicios esenciales pueden tener su circulación diaria, el fiel asistente a las iglesias permanece lejos del hogar de Dios y de todas sus oraciones y pedidos propios, de su esencia de fe en momentos de crisis. El padre José Melitón Chávez manifiesta como lleva adelante estos particulares días y envía un mensaje al fiel tucumano.

"Como diócesis hemos elaborado una serie de normas urgidas por la situación para resguardar a la gente y también a los sacerdotes. Pero nos cuesta porque uno está acostumbrado al trato cercano con la gente, más en los ambientes rurales. Aquí la gente te abraza, te besa y cuesta poner distancia", manifestó en una entrevista telefónica concedida al diario La Gaceta.

Es que también le compete una situación de cuidado extremo a José Melitón Chávez por su condición de salud que lo tuvo en coma a mediados de 2018, justamente por falencias respiratorias, factor clave que lo pone, más allá de su edad, en un claro grupo de riesgo.

El reciente obispo de Concepción le habló al tucumano para que la solidaridad se extienda, y entiende este concepto como "el valor más inmediato": "el sálvese quién pueda no funciona. Ni en el orden sanitario, ni en el social ni en el económico. Todos formamos un solo cuerpo como sociedad y como planeta. Como dice la teología de San Pablo al referirse a la Iglesia: el cuerpo es uno y por muchas que sean sus partes, todas forman un solo cuerpo".

En cuanto a la continuidad de la práctica religiosa y la intención de permanecer junto a los fieles de la iglesia en la particular circunstancia, José Melitón Chávez comunicó que "grabamos una misa para el canal local de Concepción. Tenemos presente a toda la iglesia y a la comunidad local, la gente nos puede hacer llegar sus intenciones".

Para cerrar, el padre deseó que "podamos responder con unidad cuando se descubra una vacuna. Que realmente esté al alcance de toda la humanidad, y de los pueblos más sufridos".