Así lo aseguran desde las familias que impulsan el amparo contra la obra social IOMA. Aseguran que “IOMA redujo las prestaciones a sus afiliados y ponen trabas burocráticas para dificultar el acceso a tratamientos”. Incluso, en los casos que se niega el tratamiento, muchos deciden iniciar acciones judiciales para acceder a los tratamientos o la medicación.
Mirta Catalano, una de las tantas familiareas que firmó la medida judicial y lucha contra estas problemáticas que genera el Instituto de Obra Médico Asistencial de la Provincia de Buenos Aires, dijo a Bien Despiertos, programa emitido de 7 a 9, por Radio de la Azotea, que “es muy dificil para los padres conseguir prestadores porque los transportistas, acompañantes terapéuticos, terapistas ocupacionales, psicólogos, kinesiólogos, temen trabajar con IOMA porque, aún con un amparo de por medio, no paga en tiempo y forma, hay demora de seis meses a un año”.
Agregó que “a los pacientes que si se les autorizó el medicamento, deben padecer la espera cuando tienen que renovar el pedido para continuar con el tratamiento y a otros pacientes les llega la medicación cuando ya es tarde”.
Comentá la nota