El intendente de un pueblo de Neuquén lloró al aire por el abandono de los trabajadores: cobran $35.000

El intendente de un pueblo de Neuquén lloró al aire por el abandono de los trabajadores: cobran $35.000

Víctor López habló sobre la situación de los trabajadores que quedaron a la deriva tras el parate de la embotelladora. Aseguró que se quedó sin vías para reclamar la reactivación.

«Yo quisiera tener la planta activa, que mis vecinos estén trabajando y lamentablemente, no es así». El presidente de la comisión de fomento de Santo Tomas, Víctor López, se quedó sin vías para reclamar la reactivación de la planta embotelladora de agua mineral del pueblo. Hoy se quebró al aire, durante una entrevista radial, con la impotencia de que solo quedan nueve de los 17 empleados que supo tener, con un salario que da vergüenza: cobran por mes 35.000 pesos.

«Lamentablemente, a partir del año pasado, marzo o abril, fue el último contacto con la nueva empresa a cargo de la planta embotelladora, con promesas incumplidas. En teoría, en agosto iba a volver a funcionar y no ha pasado nada», explicó esta mañana el intendente en diálogo con AM Cumbre. «Nuevamente volvemos a caer en desgracia porque, de un privilegio que tenemos como es el agua, donde muy pocos lo pueden tener, hoy tenemos una planta parada hace más dos años y que ha venido en decadencia hace prácticamente diez», planteó.

La embotelladora quedó a cargo de Gama Austral SA, una sociedad que se constituyó en 2019. Antes, había estado a cargo de una empresa del grupo Interlagos, que también la dejó en estado de abandono.

«De 17 empleados, hoy solamente hay activos nueve que están cobrando un porcentaje mínimo de su sueldo. Lamentablemente, la situación es crítica. Caemos en manos que no son las adecuadas y acá no podemos hacer mucho», describió López, quien aseguró haber «ayudado personalmente desde todos los lugares que me tocaba, pero no tenemos respuestas y la planta está parada».

El presidente de esta pequeña comisión de fomento a poco más de 230 kilómetros de Neuquén capital, dijo que el principal problema que alega la empresa es que «no puede venderla, no la puede comercializar».

«Hemos trabajado con gente de provincia, con el señor (José) Brillo para dar una mano y ayudar y meter el agua en Neuquén, en la Cooperativa Obrera, en La Anónima, pero seguimos con ese problema y, lamentablemente, los perujdicados son los empleados», apuntó.

Dijo que «siempre han cedido a los pedidos de los nuevos empresarios» e incluso «aceptaron desistir de la plata de un juicio para empezar de cero, firmaron un papel para que la planta se active y siempre terminan siendo los más perjudicados».

35.000 pesos y una «situación de mierda»

Víctor López, el intendente que llegó al cargo tras ganar en 2019 con el partido Iguales, explicó que los trabajadores «están sinceramente desahuciados». Están están cobrando un porcentaje mínimo del sueldo que hoy promedia los 35.000 pesos.

«Soy el intendente, pero soy un vecino de mi pueblo y esta situción de mierda a mí me choca mucho», se quebró López al aire finalizando la entrevista. «Yo quisiera tener la planta activa, que mis vecinos estén trabajando y lamentablemente, no es así», lamentó.

En Santo Tomás se inauguró el año pasado el hatchery donde se crían alrededor de un millón de ovas que luego se envían a Piedra del Águila, donde se inauguró este año una planta de faena. Hay diez personas del pueblo trabajando actualmente.

López insistió con la importancia de la planta embotelladora porque explicó que, «cuando llegó a tener su máximo funcionamiento hace unos 15 años, se hacía triple turno donde había mañana, tarde y noche, y había unas 26 personas de Santo Tomás trabajando». «Lo imprtante que era la planta para nosotros porque en temporada alta, en verano, se tomaban diez personas más», describió.

Comentá la nota