En un gesto de acercamiento a la Iglesia, el gobierno homenajeó al padre Basilicio "Bachi" Britez al cumplirse un mes de su fallecimiento a causa de coronavirus.

La cita fue en la sede de la Sedronar por iniciativa de su titular, Gabriela Torres, con el objetivo de poner en valor la labor pastoral del padre Bachi al servicio de los más vulnerables, entre la que se destaca la apertura de espacios comunitarios para alojar a jóvenes con consumos problemáticos y en situación de calle.

Del acto participaron el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, el grupo de Curas en Opción por los Pobres, jóvenes de las casas comunitarias impulsadas por Bachi y el presidente de la Conferencia Episcopal Argentina, monseñor Oscar Ojea.

En el ingreso a la Sedronar se descubrió una placa con la siguiente leyenda: "Al Padre Bachi (1968-2020), quien trabajó incansablemente acompañando con amor a nuestras pibas y nuestros pibes. ¡Que cuide esta institución!".

"Lo conocimos a Bachi con el presidente hace poco tiempo, y su testimonio y cómo manifestaba el horizonte que pretendía para su comunidad, nos conmovió a ambos", dijo Cafiero.

Agregó que "tenemos que tomar ese testimonio de vida, entrega y amor y redoblar el compromiso que tenemos con nuestro pueblo, con los que más lo necesitan y con los que peor la pasan".

Por su parte, Torres expresó: "Acá estamos todos los que nos comprometemos con un proyecto de país diferente, que nos incluya a todos".

En tanto, Ojea recordó que hace poco "Bachi cumplió 25 años de cura" y que deja "una herencia muy importante, una responsabilidad muy grande".

El 29 de agosto Bachi falleció de Covid-19 luego de permanecer internado dos meses en la clínica San Camilo.

"Es el partido que yo decidí jugar, fue estar del lado de la gente, acompañándola en estos momentos tan particulares, y no estar en la comodidad de mi casa. Pero, bueno, la voluntad de Dios es que, en estos momentos, yo esté en el banco de suplentes", reflexionó tras ser internado.

Bachi nació en Villa Rica, Paraguay, el 14 de junio de 1968 y su familia se trasladó a la Argentina cuando Bachi tenía apenas dos años.

Recién llegado al país, vivió junto a sus padres en una villa de emergencia cercana al Club de Golf de las Barrancas de Belgrano en la ciudad de Buenos Aires.

En 1997 fue ordenado sacerdote, y dos años después nombrado párroco de la Iglesia de Villa Palito de La Matanza.

Desde ese momento trabajó por la urbanización del barrio, que logró concretar en 2005 y más tarde estableció el Hogar del Buen Samaritano.

Ricardo Daniel Romero, coordinador del Hogar del Buen Samaritano, contó que "todo empezó en 2008, cuando un pibe se acercó a pedirle ayuda, en momentos en que el consumo de paco era fuerte en el barrio, y el padre Bachi le abrió las puertas de su casa, dispuesto a tenderle una mano".

El Hogar coordina seis espacios que integran la Red Federal de dispositivos de Sedronar: dos en Isidro Casanova, la casa "San Miguel" para varones y "Mamá Antula", para mujeres con hijos; "Cura Brochero", en Virrey del Pino; "Padre Mugica", de Villa Luzuriaga; y la casa "Nuestra Señora del Buen Viajero", en el partido de Hurlingham.

Entre todas alojan a más de 300 personas que se encuentran cumpliendo distintas fases de su proceso de tratamiento.

Del acto también participaron el subsecretario de Medios Públicos, Francisco Meritello; la intendenta de Quilmes, Mayra Mendoza; los sacerdotes Lorenzo "Toto" de Vedia, y "Pepe" Di Paola, entre otros, además de los familiares del padre Bachi.