En el Sur de España, en la ciudad de Granada, uno equipo de arqueólogos descubrió restos de más de 600 personas que, creen ellos, vivieron en tiempos del gobierno islámico en Andalucía. 

Los trabajo comenzaron en octubre del 2021, y desde entonces cubrieron un área de mil metros cuadrados. 

Allí revelaron los restos de cientos de personas en cinco fosas comunes. Allí en Granada, estaba ubicado el cementero islámico más grande d eEuropa: el Sahel bin Malik.

"Encontramos huesos humanos de todas las edades y razas y documentamos cientos de ellos”, dijo Amjad Suleyman, el líder del equipo de arqueólogos. “Los musulmanes de ese período ocultaron sus identidades para evitar ser obligados a convertirse al cristianismo y pusieron una tarjeta junto a sus sudarios para estar en las tumbas, como también encontramos pedazos de ellos en las excavaciones”.

Granada resultó la última ciudad ocupada por cristianos, donde fueron forzada toda la población a cristianizarse. Aquellos que no lo aceptaran eran exiliados.