Entre restricciones, millones acuden a una peregrinación chií en Kerbala

Entre restricciones, millones acuden a una peregrinación chií en Kerbala

Iraquíes y 40.000 extranjeros peregrinan a la ciudad sagrada para los ritos de Arbain, una de las festividades más importantes de la rama del islam chií. Conmemora los 40 días después del martirio del imán Husein, nieto del profeta Mahoma.

Millones de personas, entre iraquíes y extranjeros, realizaron hoy en Irak los ritos de la peregrinación de Arbain, uno de los eventos más importantes de la rama chií del islam, entre fuertes medidas en seguridad y sanitarias, además de las restricciones impuestas para prevenir contagios de covid-19.

Debido a la pandemia de la covid-19, este año las autoridades de Irak han restringido la peregrinación a tan solo 40.000 extranjeros, que junto a millones de iraquíes han acudido a la ciudad sagrada de Kerbala, en el sur del país, donde además se ha desplegado un gran dispositivo sanitario.

El teniente coronel de la Policía de Karbala, Abas Al Hayani, dijo a Efe que la ciudad recibió los pasados días a "millones de visitantes" de diferentes ciudades iraquíes para participar en la conmemoración del Arbain (cuarenta, en árabe).

Según la fuente, los millones de peregrinos iraquíes llegaron a Kerbala a pie, como es habitual, mientras que ciudadanos procedentes de Irán, el Líbano o los países del golfo Pérsico también acudieron al evento.

Esta peregrinación anual, la más importante para los chiíes, conmemora los 40 días después del martirio en el año 680 del imán Husein, nieto del profeta Mahoma e hijo del imán Ali, considerado la principal figura religiosa para los musulmanes chiíes.

Al Hayani añadió que un gran dispositivo de sanitarios ha sido desplegado en los accesos de la ciudad para atender a los peregrinos, mientras que las fuerzas de seguridad iraquíes han estado trabajando en los últimos días para prevenir cualquier incidente.

Durante la peregrinación del Arbain, se realizan en Kerbala obras que reproducen la batalla en la que murió el imán Husein, cuyo mausoleo se encuentra en esa ciudad sagrada.

Como muestra de solidaridad con el sacrificio de Husein, los peregrinos se golpean y flagelan el pecho y la cara, también para expresar la tristeza por la muerte de esta relevante figura para los chiíes.

La mayoría de ellos se visten de negro e, incluso algunos, se golpean la cabeza con instrumentos puntiagudos hasta sangrar, en un ritual llamado Al Tadbir.

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