Sin la posibilidad de financiarse de forma externa, el Gobierno tiene decidido recurrir a la emisión monetaria y al endeudamiento interno para obtener los pesos que necesita para terminar los gastos de año, pero también para poder afrontar el paquete de medidas de corte electoralista en vistas de lograr revertir el resultado adverso que cosechó el Frente de Todos en las Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO).

Pero en concreto, ¿de cuánto dinero estamos hablando? ¿Cuánto fue lo que se emitió sin respaldo alguno en términos monetarios? Si se toma el último giro del Banco Central de la República Argentina (BCRA) al Tesoro, es decir la plata que imprime el ente encargado de cuidar la estabilidad monetaria para que gaste el Gobierno, desde el 1° de enero de 2021 hasta el último 27 de septiembre se emitieron $960.000.000.000.

Para que se entienda de una forma gráfica, esto equivale a $41.929 por segundo. Es decir que por segundo ya se emitieron más de dos salarios mínimos, vitales y móviles, o casi un haber mínimo y medio. Tan sólo en un segundo. Por minuto, la cuenta da $2.515.723 lo que cuesta, para que se den una idea, un auto cero kilómetro de gama media en la argentina.

Si vamos a verlo por hora, el BCRA emitió $150.943.396 para que gaste el Gobierno. Antes que te termines de marear con los números, te pasamos lo que se emite por día. La suma nada despreciable de $3.622.641.509. A todo esto le falta, de acuerdo al Presupuesto 2021 y la declaraciones de varios funcionarios, cerca de $550.000 millones.

En esa cuenta se suman los gastos ya comprometidos y el paquete anunciado, hasta ahora porque pueden agregarse cuestiones, para intentar revertir el resultado de las PASO. Es decir que en los próximos 3 meses del año el Gobierno tiene pensado emitir el 50% de lo que ya emitió hasta ahora. 

Uno de los economistas que más sigue este tipo de cuestiones es Bruno Panighel que suele publicar comparaciones para darse una dimensión de la cantidad de billetes que crea el BCRA para los gastos gubernamentales. Siempre teniendo en cuenta el billete de $1.000, que es el de mayor denominación. De hecho, este economista fue noticia la semana pasada al proyectar que con lo que se imprimió hasta ahora, se podría recrear la altura del Obelisco de Buenos Aires al menos ocho veces.

El cálculo que hizo fue el siguiente. Primero, cada fajo de 100 billetes de $1.000 tiene una altura de 1,5 centímetros, lo que daría casi uno $ 7 millones por metro: 100000 x (100/1,5) = $6.666.666 por metro. Al tener el Obelisco una altura de 67,5 metros,  cada uno representaría unos $450 millones.

Pero no se quedó ahí. Si ponemos un billete de $1.000 al lado del otro se necesitan $729.120.000 para cubrir toda la cancha de River. Al BCRA le lleva tan sólo 4 horas y 40 minutos imprimir ese monto siempre de acuerdo a las cifras de lo que lleva en el 2021. De esta forma, en un año, logra cubrir 1.317 estadios Monumentales. Si preferís hablar de kilómetros cuadrados o barrios; haciendo la misma cuenta se puede cubrir tres veces la totalidad de la superficie de la Boca o casi dos veces la de Recoleta.

Uno de las cuestiones troncales para evitar que toda la emisión monetaria impacte de lleno, aunque lo hace, en el valor del peso, es decir en la inflación, tiene que ver con la capacidad de reabsorberlos mediante herramientas financieras. 

Para eso el BCRA utiliza las Letras de Liquidez (Leliq) y los Pases pasivos, con los cuales absorbe el excedente de pesos de la plaza financiera. Pero estos instrumentos chocan con sus propias limitaciones. Al pagar una tasa de retorno efectiva del 45,4% anual, la entidad monetaria debe reabsorber el rendimiento que paga.

Con datos al 22 de septiembre último, las Leliq alcanzaban a $2.199.014 millones ($2,2 billones) y los Pases pasivos, $2.065.496 ($2,07 billones), un total de $4.264.510 millones que al tipo de cambio oficial de $98,49 equivalen a USD 43.299 millones, por encima de las reservas brutas de USD 43.178 millones a esa fecha.