Las delegaciones de Israel y Estados Unidos, encabezadas por el asesor de Seguridad Nacional en funciones, Jacob Nagel; el Director General del ministerio de Relaciones Exteriores israelí, Dore Gold; y el subsecretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, se reunieron ayer, jueves, en Jerusalem para realizar la última ronda del diálogo estratégico anual de Estados Unidos e Israel.
Las delegaciones discutieron una amplia gama de asuntos de seguridad, así como las amenazas compartidas, oportunidades para la cooperación regional y otros asuntos regionales, incluyendo a Irán. El diálogo estratégico es una oportunidad para que tanto los Estados Unidos como Israel, puedan discutir a nivel superior una variedad de temas y perspectivas, y evaluar sus implicaciones políticas para ambos países.
Los Estados Unidos e Israel acordaron que las amenazas de las organizaciones terroristas son uno de los mayores desafíos que enfrenta actualmente el Oriente Medio. La capacidad misilística de Hezbollah y el terrorismo de Hamas en Gaza también presentan una amenaza inmensa. La disposición de Hezbollah a usar la violencia contra Israel e importar armas hacia el Líbano es una violación de la Resolución 1701 del Consejo de Seguridad de la ONU y amenaza a la seguridad en la región.
En cuanto a Irán, ambos países acordaron continuar su estrecha cooperación para luchar contra todas las amenazas que emanan de la República Islámica. Las delegaciones condenaron el apoyo al terrorismo en la región y en todo el mundo.
Ambos acordaron que el diálogo pone de relieve la fortaleza de la alianza estratégica entre los EE.UU. e Israel, que se basa en valores compartidos e intereses comunes, y el compromiso de garantizar la seguridad de Israel.
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