Celebran 119 años de la coronación de Nuestra Señora de Itatí

Celebran 119 años de la coronación de Nuestra Señora de Itatí

Una multitud de fieles y peregrinos celebraron el 119º aniversario de la coronación pontificia de Nuestra Señora de Itatí, Patrona de la Arquidiócesis de Corrientes (Argentina).

 

La Misa central se celebró el 16 de julio y fue presidida por el Vicario General de Corrientes, P. José Billordo, quien leyó la homilía preparada para la ocasión por el Arzobispo local, Mons. Andrés Stanovnik, ausente por razones de salud.

Mons. Stanovnik realizó su reflexión en torno al lema que alentó los festejos “Junto a la Cruz y la Virgen, bautizados y enviados” y con motivo del Mes Misionero Extraordinario convocado por el Papa Francisco para octubre próximo.

“¿Qué nos dice la Cruz y la Virgen a los cristianos, es decir, a los bautizados y enviados? La Cruz es el signo de la victoria sobre la muerte y el triunfo definitivo de la vida. Dios le ganó definitivamente la partida a la muerte. Ya no es necesario barajar de nuevo, las cartas están echadas definitivamente a favor de la vida, de toda vida y de la vida de todos”, enfatizó. 

En ese sentido, el Arzobispo manifestó que “junto a María, nuestra Madre, nos sentimos felices y seguros, como un niño en brazos de su madre” y el peregrino “siente que Ella lo acoge y lo comprende, porque es Madre y sabe por experiencia propia qué significa estar junto a la Cruz de su Hijo”.

“En sus brazos, el peregrino se siente seguro y con Ella le reza a Dios, se arrepiente y llora sus pecados, para regresar consolado, renovado y decidido a hacer el bien siempre y donde haga falta”.

Asimismo, el peregrino “que regresa a su casa con la bendición de la Virgen de Itatí, se va fortalecido para la misión”, expresó el Arzobispo.

“Unidos estrechamente a la Virgencita de Itatí, a Ella junto a la Cruz de su Hijo, agradecemos el bautismo y le expresamos nuestra alegría de pertenecer a la Iglesia, comprometiéndonos a ser misioneros valientes del Evangelio en todas partes, aunque por ello tengamos que sufrir desprecio y persecución”, afirmó. 

El Prelado escribió que en cualquier circunstancia la Virgen “cubre con su manto al peregrino que se confía a Ella y eso le da seguridad y fortaleza en su misión”.

Los fieles peregrinaron al Santuario Nuestra Señora de Itatí desde días antes de esta gran celebración para participar en la novena dedicada en su honor, la que concluyó con la fiesta patronal el 9 de julio. 

Luego, desde el 13 de julio se realizaron instancias de oración y celebraciones Eucarísticas para preparar la fiesta de la coronación. 

Las distintas comunidades llegaron el domingo 14 de julio con sus respectivas imágenes. Algunos lo hicieron a pie, otros a caballo, en bicicleta y en carreta.

De esta forma, fueron repletando las calles de la ciudad y la Virgen de Itatí salió a su encuentro encabezando una gran procesión.  

La noche del 15 de julio se realizó el Festival de la Fe del peregrino y a las cero horas del 16 de julio se lanzaron fuegos artificiales y la multitud vitoreó a la querida imagen mariana.

En la jornada se realizaron actividades tradicionales como la procesión náutica, la procesión a pie con los santos patronos, el rezo del Rosario, Misas y la procesión de antorchas.

 

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