Las fuertes lluvias de los últimos días y la desidia por parte de las autoridades municipales y provinciales han dejado varias localidades de Cañuelas bajo agua. Como es el caso de Máximo Paz, sobre la ruta 205. En especial el barrio Las Praderas, donde casi el 80% de la población debió ser evacuada.

En el barrio Altos verdes hubo por lo menos 40 personas evacuadas, y en menor medida en el corredor de la ruta 3. Incluso el barrio Santa Mónica, que se caracteriza por estar más elevado que el resto, se vio colapsado. Los vecinos adjudican esta inundación a obras mal planificadas de entubamiento en el Municipio de Ezeiza.

Guillermina, de Máximo Paz contaba a La Izquierda Diario que “es la peor inundación que viví desde que me mude. Me desperté y estaba todo inundado. Y ya no podíamos hacer nada”. Por su parte Natalia, una vecina del barrio La Torre indicó que “yo me levante a las 6:00 para ir a trabajar y el agua ya me llegaba a los talones. Ahí desperté a todos, levantamos lo que pudimos y nos sentamos a esperar. Porque ¿Qué más podemos hacer? No podemos ni salir de casa, es horrible. Lo que más bronca nos da es que sabemos de dónde viene el agua. Claramente baja del barrio Moradas, que bien seco está, e inunda todo La Torre, Máximo Paz, y Máximo Paz Oeste. Es un desastre”.

En el corredor de ruta 3, Santa Rosa también sufrió las consecuencias de la falta de obras hídricas. Un vecino del barrio cuenta que “el puente que una Marcos Paz con Cañuelas esta destruido, a punto de derrumbarse. Cada vez que llueve fuerte el puente se ve desbordado, es un verdadero peligro. Y la escuelita rural 21 también quedo bajó agua. Y hubo varias familias que se autoevacuaron. Y nos da bronca que el municipio no aparezca. No dan la cara”.

Al respecto, el candidato a intendente del Frente de Izquierda- Unidad planteó que “si bien las tormentas son naturales, las inundaciones no. Es indispensable un plan de obras hídricas. Controlado y gestionado por sus propios vecinos y trabajadores afectados. Porque son ellos los que viven día a día la desidia estatal, y hace años que vienen planteando esta problemática sin ser oídos”. Agrega “Los gobiernos miran para otro lado. Mientras el gobierno municipal hace una campaña millonaria, barrios como Máximo Paz y Santa Rosa sufren las consecuencias de la desinversión”. “Todo el arco político garantiza que los fondos de la provincia y del país se fuguen con la deuda externa. Cuando la deuda es con el pueblo. Por eso, hay que organizarse para pelear por nuestros derechos”.