Esta es una semana de particularidades ideológicas y diversos mensajes geopolíticos. El presidente Alberto Fernández fue orador estelar en el aniversario del partido comunista chino; lo invitó especialmente su par Xi Jinping, con quien mantiene una estrecha y cordial relación. Mientras, el ministro de Economía, Martín Guzmán, viajó al G-20 (la meca del capitalismo) para reunirse con los mismos referentes internacionales con los que ya se entrevistó al menos 4 veces desde abril para discutir el potencial acuerdo con el Fondo Monetario Internacional.

Guzmán pedirá lo mismo: clemencia. Le repetirán lo mismo: un plan económico.  Y además le recordarán que desde el Club de París quieren un monitoreo del FMI sobre el gasto fiscal. Con este panorama, por lo menos hoy asoma al menos empantanada y fría la negociación con el FMI, aunque Guzmán volvería  reunirse el jueves con la sonriente Kristalina Georgieva, timonel del organismo internacional de crédito. 

En los sectores productivos  los ánimos son variopintos. Los más ofuscados están en el campo donde los autoconvocados organizan una medida de protesta por la política agropecuaria del Gobierno el 9 de julio en San Nicolás. Estarán los 4 presidentes de las entidades que componen la Comisión de Enlace (Sociedad Rural, Coninagro, CRA y Federación Agraria). Un gesto político que en Balcarce 50 "cae gordo".

No le encuentran la vuelta al precio de la carne ni de un lado ni de otro. Por ejemplo, según un informe del IPCVA, las exportaciones "caerían entre un 30 y un 35% en los próximos dos meses" por el cierre parcial de las ventas al exterior. Pero, además desde la posición del sector, la decisión oficial generaría "unas 25.000 toneladas menos de producción al mes" que significaría perder cerca de 100 millones de dólares mensuales de divisas.

Las nuevas normas de etiquetados y producción de alimentos sustentabales son otro capítuto de tensión con las alimenticias y el campo. El Consejo Agroindustrial pidió, en un comunicado, que "las acciones para lograr una transición hacia paradigmas de producción y de consumo sostenibles requieren de una acción nacional e internacional coordinada". Copal, la cámara de las alimenticias que preside Daniel Funes de Rioja, también timonel de la Unión Industrial salió con los tapones de punta por la ley de etiquetado frontal. En un comunicado de prensa, señaló que, en cambio, pretenden una normativa que "informe correctamente al consumidor y que permita a la industria mejorar el perfil nutricional de los alimentos y bebidas en forma gradual".

Coincidente con la nueva extensión del programa Precios Cuidados, Arcor festejó sus 70 años en el país con una celebración virtual en la que Luis y Alfredo Pagani recordaron los principios de la compañía de Arroyito y en el que el gobernador, Carlos Schiaretti, consideró que esa compañía "es un referente empresarial  de la importancia que tiene Córdoba para tentar a generar empleo". 

En la Union Industrial hubo reunión de Junta directiva y se difundieron datos que siguen avalando que, aunque con poco, la industria continúa siendo el motor de las buenas nuevas para el oficialismo. "Hubo un aumento de 2,5% con heterogeneidades al interior de la industria y, de 16 sectores analizados, 10 mostraron subas con respecto a los primeros cuatro meses, mientras que el resto aún se encuentra por debajo". En cuando al nivel de empleo asalariado registrado, en el mes de marzo, "la industria mostró un incremento interanual de 1,7%, siendo el que más creció en términos absolutos" y la entidad reclamó "una salida gradual de las restricciones laborales vigentes, con el objetivo de potenciar la recuperación del empleo formal y avanzar en materia de productividad". 

Temporada alta en las entidades empresarias  

Como se ve, en julio largó la temporada alta de reuniones en el sector privado. Los empresarios cristianos,  nucleados en ACDE (Asociación de Dirigentes de Empresa) realizaron su XXIV Encuentro Anual en la que reclamaron "reconstruir la confianza social y apostar a la inversión y al empleo".  Ante más de 900 personas que siguieron los debates en forma virtual, referentes sociales, empresariales, sindicales, políticos y académicos intercambiaron ideas y experiencias en torno a la consigna “Hacia un capitalismo más humano” y donde el propio Papa Francisco envió un mensaje.

El Sumo Pontífice (recuperándose actualmente de una intervención quirúrgica que se le practicó el domingo) había resaltado la obligación de los empresarios argentinos de “invertir en el bien común y no esconder la plata en los paraísos fiscales”, al tiempo que los convocó a elegir “el camino de la economía social” y que hay que “volver a la economía de lo concreto y lo concreto es la producción”.

En IDEA también precalentaron motores para el próximo Coloquio 2021 en el que el Comité organizador ya está definiendo detalles con la 4ta Experiencia IDEA Management donde participaron 1.500 asistentes en todo el país. “En estas tres mañanas hemos aprendido sobre las tendencias y las transformaciones que nos están atravesando y que se han acelerado por la pandemia. Las organizaciones deben cultivar la creatividad y la innovación, esos son los desafíos que tienen los líderes para transformar a las empresas y a la sociedad”, enfatizó el titular de la entidad Roberto Murchison en el cierre.

Se acerca el segundo semestre 2021 y la suerte de la economía se va echando en materia de inflación y crecimiento:  crecen las expectativas, las ansiedades y las elecciones están a la vuelta de la esquina.

 

Por Alejandra Gallo