Alberto Fernández, en busca de liderazgo regional: reforzó su alianza con Lula y bajó una orden a sus funcionarios

Alberto Fernández, en busca de liderazgo regional: reforzó su alianza con Lula y bajó una orden a sus funcionarios

La reacción oficialista en apoyo al presidente brasileño se activó en las primeras horas tras el asalto en Brasilia y continuó durante el día de ayer. El acuerdo de integración pendiente y un mensaje para la próxima cumbre regional

 

MARTÍN DINATALE

Alberto Fernández no sólo envió mensajes de apoyo a Lula Da Silva apenas se conocieron las primeras imágenes de manifestantes bolsonaristas tomando los edificios del Congreso, el Poder Judicial y el Planalto en Brasilia. También el Presidente emitió una señal inequívoca hacia su par brasilero: ratificó la reunión bilateral que mantendrán en Buenos Aires a fin de mes, aseguró un apoyo en la cumbre de la CELAC y pidió a su gabinete mantener una línea abierta permanente con el equipo de Lula Da Silva.

El efecto del gobierno argentino ante los ataques a la gestión de Lula fue el de pleno alineamiento y apoyo al actual presidente de Brasil. "Hoy más que nunca la Argentina está al lado de Lula y hay un diálogo de apoyo permanente a Lula al más alto nivel", dijo a El Cronista el embajador argentino en Brasilia, Daniel Scioli.

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Horas antes de esto, Alberto Fernández publicó en su cuenta de Twitter que "la democracia es el único sistema político que garantiza libertades y nos obliga a respetar el veredicto popular". Y advirtió que "quienes intentan desoír la voluntad de las mayorías, atentan contra la democracia y merecen no solo la sanción legal que corresponda, sino también el rechazo absoluto de la comunidad internacional".

En este sentido, la directiva que arrojó el Presidente fue la de mantener en pie la reunión bilateral en Buenos Aires con Lula Da Silva que está prevista para el 23 de enero. Allí se firmará un acuerdo de integración amplio que contempla la profundización de vínculos financieros, energéticos, de infraestructura, comercio y negocios.

También el apoyo regional que impulsa Alberto Fernández a Lula Da Silva se dará con mayor énfasis en la cumbre de presidentes de la CELAC prevista para el 24 y 25 de enero en Buenos Aires donde la Argentina ocupa la presidencia pro tempore de este bloque de América latina y el Caribe.

Quiero expresar mi repudio a lo que está sucediendo en Brasilia. Mi incondicional apoyo y el del pueblo argentino a @LulaOficial frente a este intento de golpe de Estado que está enfrentando.

Allegados a Alberto Fernández ratificaron a El Cronista que la Argentina impulsará en esa cumbre de la CELAC un párrafo aparte en el documento final para repudiar los ataques de manifestantes bolsonaristas y apoyar fuertemente al nuevo presidente de Brasil.

Ayer, Alberto Fernández, como presidente pro témpore de la CELAC en ejercicio emitió un comunicado en el que repudió "enérgicamente" desde ese foro la violencia que hubo en Brasil y un fuerte apoyo a Lula

También el Presidente adelantó la postura que tendrá la cumbre de presidentes en Buenos Aires al sostener que "es necesario defender con decisión a los que maltratan la democracia instalando discursos de odio, insultando opositores y promoviendo mentiras en los medios y redes sociales para generar malestar y enojo".  

De hecho, este apoyo internacional fue ratificado por el Gobierno al ministro de Relaciones Exteriores de Brasil, Mauro Vieira, quien ayer dijo que "el patrimonio de paz y de avances de la sociedad brasileña fue defendido por las instituciones y seguirá siendo defendido, con pleno apoyo de la comunidad internacional".

 

En paralelo a esto hubo llamados de Alberto Fernández y el canciller Santiago Cafiero a Celso Amorim, principal asesor de Lula da Silva. Hubo una propuesta incluso del Presidente para viajar de inmediato a Brasilia a dar muestras de respaldo. Pero en Brasil le dijeron que no hacía falta semejante esfuerzo.

En este contexto, el canciller Cafiero advirtió sobre una "radicalización de las derechas antidemocráticas en la región", al referirse a los ataques de un grupo de seguidores del expresidente Bolsonaro contra las instituciones de Brasil. 

"En la oposición había una colonización de tendencias antidemocráticas, de derecha antidemocrática que se veía en el resto de la región. Esto es tanto (Donald) Trump en los Estados Unidos, (Jair) Bolsonaro en Brasil y lo representa (Mauricio) Macri en la Argentina", dijo el ministro de Relaciones Exteriores.

Las expresiones de Cafiero profundizaron la grieta en la Argentina. El ataque del canciller a Macri despertó reacciones en el PRO. Fernando Straface, secretario General y de Relaciones Internacionales del gobierno porteño le respondió: "Mala praxis y neblina democrática en las palabras del canciller Santiago Cafiero. El Presidente Mauricio Macri es un activo de enorme confianza internacional para la Argentina".

Pero en Juntos por el Cambio se vieron posturas contrapuestas. Mientras que todo el arco de la UCR y la Coalición Cívica repudió los episodios de violencia Patricia Bullrich no dijo nada de esto y recriminó al Presidente: "Demócratas con otros países y autoritarios aquí".

 

A la vez, el planteo de Cafiero adelanta un debate cruzado que se dará en la cumbre de la CELAC donde conviven sectores de la izquierda latinoamericana alineados con Lula Da Silva como la Argentina, México, Chile y Bolivia contra presidentes de derecha como en Uruguay o Ecuador.

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