Abusos: exigen que 12 cardenales no participen del cónclave en Roma

Abusos: exigen que 12 cardenales no participen del cónclave en Roma
Una asociación de víctimas de violencia sexual difundió una "lista negra" de prelados que omitieron o encubrieron casos de pederastia. Incluye al argentino Leonardo Sandri y a los favoritos Sean O'Malley, de EE UU, y a Peter Turkson, de Ghana.
Mientras la curia delinea el perfil del candidato para suceder a Benedicto XVI, la asociación de familiares de las víctimas de abusos por parte de sacerdotes publicó una "lista negra" de 12 cardenales que omitieron, encubrieron o no combatieron con la fuerza suficiente los delitos sexuales cometidos por parte del clero. Entre la "sucia docena" de purpurados se encuentran muchos de los arzobispos que, según la prensa, son favoritos para ocupar el trono de San Pedro y que, por estas horas, están reunidos en las congregaciones generales previas al cónclave.

Para la Red de Supervivientes de personas que sufrieron Abusos por parte de Sacerdotes (Snap, por sus siglas en inglés), muchos de los cardenales no son dignos de elegir ni de ser elegidos como Papa por haber encubierto o justificado la pederastia clerical, negando la evidencia. En la lista de imputados se encuentran: el mexicano Norberto Rivera Carrera, el arzobispo de Honduras, Oscar Rodríguez Maradiaga, los estadounidenses Timothy Dolan de Nueva York, Donald Wuerl de Washington y Sean O'Malley de Boston –que en los últimos días la prensa indicó como bien posicionado–, Leonardo Sandri de Argentina, los italianos Angelo Scola, arzobispo de Milán, el camarlengo Tarcisio Bertone, el australiano George Pell, el checo Dominik Duka, el canadiense Marc Ouellet y el ghanés Peter Turkson, primero en las apuestas.

Dos exponentes de la Snap, Barbara Doris y Davis Clohessy, aseguraron que el cardenal más comprometido es el arzobispo de Nueva York que, según sus dichos, ideó un plan "para pagar 20 mil dólares a los sacerdotes implicados en los abusos sexuales para que abandonen los hábitos". La justicia comprobó que 12 curas recibieron dinero del cardenal neoyorquino. Algunos miembros de la asociación acusaron también al cardenal Scola "de haber querido minimizar el escándalo y el rol de la Iglesia" en los abusos por parte de los sacerdotes de Estados Unidos.

Los familiares criticaron, además, el comportamiento del cardenal Maradiaga, quien, en referencia a los abusos, declaró: "Yo iría con gusto a prisión antes de hacerles daño a mis curas. Yo no soy un policía." El prelado de Canadá también tuvo una frase infeliz al sostener que "sólo el 10% de las acusaciones contra los sacerdotes fueron probadas".

Para la Snap lo peor aún está por venir: "Solo recientemente –sostiene la agrupación– el acontecimiento salió a la luz. En Estados Unidos comenzó más o menos hace diez años y en algunos pocos países europeos es aún más reciente. El escándalo, para nosotros, tiene todavía que revelarse en la mayor parte de los países."

“Creemos que no toca a la Snap decir quién tiene que participar del cónclave ni dar una calificación de los cardenales: depende de los mismos cardenales juzgar quién es pasible de ser Papa sin necesidad de pedir consejo a la Snap", se limitó a declarar el portavoz de la Santa Sede Federico Lombardi, cuando le preguntaron por la "sucia docena". «

un año de cárcel para berlusconi

Silvio Berlusconi fue condenado a un año de cárcel en el llamado caso Unipol: un proceso que investigó la publicación de escuchas telefónicas ilícitas en el diario Il Giornale, propiedad de su hermano Paolo, quien fue procesado junto a il Cavaliere y condenado a dos años y tres meses de prisión. Para el Tribunal de Justicia de Milán, la finalidad del ex presidente del Consejo de Ministros de Italia era perjudicar al entonces líder de izquierda Piero Fassino, favorito en las elecciones de 2006 y principal rival político del magnate de los medios.

La historia del caso Unipol se remonta al 2005 cuando Il Giornale –matutino de derecha del cual es titular el hermano menor de Berlusconi desde inicios de los ’90– publicó una escucha telefónica entre el entonces secretario del partido Demócratas de Izquierda –agrupación que confluyó en el Partido Democrático–, Piero Fassino, y el administrador delegado de la aseguradora Unipol, Giovanni Consorte. En la charla, el actual intendente de la ciudad de Turín le decía al banquero: "Entonces, ¿tenemos un banco?" A partir de estas palabras, muchos creyeron que el líder de izquierda estaba involucrado en la compra de la Banca Nazionale del Lavoro (BNL). Operación que no se concretó ya que, en 2006, el BNL entró a formar parte del grupo bancario francés BNP Paribas.

Comentá la nota