Una visita que sirva como gracia para dejar atrás el odio

Una visita que sirva como gracia para dejar atrás el odio

En un clima de grandes expectativas ha iniciado el 20 Viaje Apostólico del Papa Francisco a Colombia, a llevarse a cabo desde este seis y hasta el próximo 11 de setiembre.

 

Expectativas porque el “Papa de la Paz”, tal como lo llaman muchos de los que lo esperaban en tierra colombiana, visita el territorio en medio de una situación de perplejidad política debido al conflicto armado durado más de 60 años.

Han sido casi diez mil los kilómetros recorridos por el Papa Francisco para abrazar al pueblo sufriente de Colombia, que, como dijimos, vive una terrible ruptura como consecuencia de los años de violencia y guerra que han llegado a afectar hasta la mismísima dignidad humana de los colombianos.

Es de destacar la importancia de la comprensión de la dimensión espiritual del viaje que realiza el Pontífice, quien llega con una invitación concreta, aquella de ser “artesanos de la paz”, y con una voz de aliento que quiere movilizar a todos, tal como reza el lema de su visita, a “dar el primer paso”.

En ese sentido es que los obispos colombianos han retenido necesario reiterar en más de una oportunidad, que la visita del romano pontífice posee un carácter puramente pastoral y evangelizador, rechazando claramente y también poniendo en guardia, acerca de cualquier tipo de manipulación política o ideológica que quiera atribuírsele a la misma.  

Es deseo del episcopado colombiano en cambio, que esta visita sirva como gracia para dejar atrás el odio, la venganza, las injusticias y la corrupción, para dar el primer paso en el camino de construcción de una Colombia nueva que vea a partir de sí misma, de su historia y experiencia, un nuevo amanecer trayendo el progreso del pueblo, el respeto de los derechos humanos y una sociedad reconciliada y fraterna.

Y un requisito fundamental será con seguridad, aquel de poner al ser humano - en modo definitivo -por encima de cualquier tipo de manipulación política, ideológica y económica.

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