Tres obispos argentinos viajaron a Colombia para participar del Congreso Eclesial por los 50 años de la II Conferencia General del Episcopado Latinoamericano, jornadas que se desarrollan desde hoy y hasta el 26 de agosto en la ciudad de Medellín. 

Se trata de monseñor Marcelo Daniel Colombo, arzobispo de Mendoza y vicepresidente segundo de la Conferencia Episcopal Argentina (CEA), monseñor Carlos Humberto Malfa, obispo de Chascomús y secretario general de la CEA, y monseñor Jorge Rubén Lugones SJ, obispo de Lomas de Zamora y presidente de la Comisión Episcopal de Pastoral Social. 

Organizado por el Consejo Episcopal Latinoamericano (Celam), la arquidiócesis de Medellín, la Confederación Latinoamericana de Religiosos y Religiosas (CLAR) y Cáritas América Latina y el Caribe, el Congreso Eclesial se desarrollará en las instalaciones del Seminario Mayor Arquidiocesano de Medellín, donde hace 50 años se celebró lugar la conferencia que tuvo la intención de aplicar las conclusiones del Concilio Vaticano II. 

El objetivo de este Congreso Eclesial es “reconocer con gratitud la aplicación de Medellín en nuestras Iglesias particulares, profundizar en algunos de los temas fundamentales que siguen siendo actuales en el presente, examinar nuevos signos de los tiempos de hoy y proyectar una acción evangelizadora que tenga en cuenta el espíritu de esa II Conferencia, enriquecido con el Magisterio de la Iglesia latinoamericana, así como el Magisterio Pontificio, especialmente con la enseñanza del papa Francisco”. 

La II Conferencia General del Episcopado Latinoamericano se desarrolló del 26 de agosto al 7 de septiembre de 1968, tres años después de la clausura del Concilio Vaticano II. Fue inaugurada por el papa Pablo VI en la catedral metropolitana de Bogotá. Era la primera vez que un Papa llegaba al continente. Participaron cardenales, arzobispos, obispos, sacerdotes, religiosos y religiosas, seglares y observadores no católicos. 

“La Iglesia en la actual transformación de América Latina a la luz del Concilio”, fue el tema central de la Conferencia. De este encuentro surge el “Documento de Medellín”. La primera Conferencia General del Episcopado Latinoamericano se había realizado en Río de Janeiro, Brasil, en 1955.