Tensión por la masiva concurencia judía a Explanada de las Mezquitas

Tensión por la masiva concurencia judía a Explanada de las Mezquitas

Más de 1.300 judíos acudieron al lugar con motivo de la fiesta del Tisha BeAv. El ministro de Asuntos Exteriores de Jordania, Ayman Al Safadi, lo consideró una provocación y sugirió que podría desembocar en otro conflicto. La policía informó incidentes.

Más de 1.300 judíos visitaron el martes la Explanada de las Mezquitas de Jerusalén, en la parte oriental de la ciudad, con motivo de la fiesta del Tisha BeAv, lo que provocó una señal de preocupación hacia adentro del mundo árabe.

El ministro de Asuntos Exteriores de Jordania, Ayman Al Safadi, advirtió que el alto número de visitas podría provocar más tensión durante una reunión urgente que celebró la Organización para la Cooperación Islámica en Estambul, donde se trató la crisis desatada el 14 de julio.

"El número de extremistas que asaltaron hoy Al Aqsa es un número récord que no se había registrado desde el comienzo de la ocupación israelí en 1967", dijo Al Safadi, según el diario Times of Israel.

La policía israelí, en alerta durante toda la jornada, informó pequeños altercados en la zona sagrada que los judíos denominan Monte del Templo, y en los alrededores de la Ciudad Vieja.

La explanada, tercer lugar sagrado para el Islam y el primero para el judaísmo, fue escenario de múltiples conflictos en las últimas semanas después de que Israel colocase medidas de seguridad extraordinarias en las puertas, tras un ataque el día 14 de julio, en el que murieron dos policías israelíes y los tres atacantes árabe-israelíes.

Los judíos pueden entran durante la hora de visitas a la explanada pero no tienen permitido rezar, aunque en los últimos años ha aumentado el número de quienes piden cambiar este statu quo que rige desde hace 150 años.

Seis visitantes judíos fueron expulsados del sagrado recinto esta mañana por "violar las normas" y otros tres y un fiel musulmán fueron detenidos e interrogados tras participar en un altercado violento, añadió la portavoz policial, Luba Samri.

Los judíos practicantes se reúnen para leer la Torá y llorar en la fecha en que, según su tradición, tuvo lugar la destrucción de sus dos templos sagrados (el primero en 586 A.C. por los babilonios y el segundo en 70 D.C. por los romanos), la expulsión de los judíos de España en 1492 y el envío de miles de personas al campo de concentración nazi de Varsovia.

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