El nuncio apostólico en la Argentina, monseñor León Kalenga Badikebele, informó esta mañana que el Santo Padre Francisco nombró obispo de Salto, en la República Oriental del Uruguay, al presbítero doctor Fernando Miguel Gil, de 65 años, perteneciente al clero de la diócesis de Merlo-Moreno.

Monseñor Fernando Miguel Gil, Licenciado en Teología (1986) por la Universidad Católica Argentina (UCA) y doctor en Teología (1989) por la Universidad Gregoriana de Roma, nació el 8 de mayo de 1953, y fue ordenado sacerdote el 25 de marzo de 1983. Sucederá en la diócesis uruguaya de Salto a monseñor Pablo Galimberti, de 77 años, a quien el Santo Padre le aceptó la renuncia presentada por haber cumplido la edad que señala la norma canónica.

La diócesis de Salto, en el Uruguay, tiene una superficie de 49.419 kilómetros cuadrados, con una población aproximada de unos 390.000 habitantes. Cuenta con 16 parroquias, 231 iglesias y capillas, 36 sacerdotes (20 diocesanos y 16 religiosos), 8 diáconos permanentes, 68 religiosas y 34 instituciones educativas de la Iglesia.