El Rabino Mayor Sefardí de Israel criticó a la multitud de judíos que visitaron el Monte del Templo en Tisha b’Av y que marcó un record.

En un mensaje público el martes por la tarde, el Gran Rabino Yitzhak Yosef dijo, de acuerdo con Israel National News, que el día 9 de Av, el día en que el Templo fue destruido, “es imperativo recordar que la peregrinación al Monte del Templo está prohibida por Ley judía. Los judíos que ascienden al Monte del Templo profanan su santidad “.

Al final de las horas de visita ese día, unos 1.300 judíos habían visitado el sitio. En el Día de Jerusalén, en mayo, unos 900 judíos visitaron el Monte del Templo, fijando el récord anterior.

El martes, en una reunión del Comité Ejecutivo de Emergencia de la Organización de Cooperación Islámica, el ministro de Relaciones Exteriores de Jordania, Ayman Safadi, también criticaron el gran número de visitantes y dijeron que es probable que haya más disturbios en el Monte del Templo.

“El número de extremistas que asaltaron hoy a Al-Aqsa está en un número récord, mayor que cualquier otro desde el comienzo de la ocupación israelí en 1967”, dijo Safadi en la reunión de Estambul, en la que participaron ministros de relaciones exteriores de 57 países.

“Crisis muyo más peligrosas podrían surgir como resultado de continuas violaciones israelís. Si Israel no desarraiga el origen de las tensiones, si la ocupación no termina, Si Jerusalém Oriental no es independiente y no es la capital de la soberanía del Estado Palestino de acuerdo a las líneas de 1967”, dijo Safadi, reporta The Times of Israel.

Decenas de miles de personas también visitaron el Muro de las Lamentaciones a lo largo del día después de que miles de personas se reunieran en el sitio el lunes por la noche para leer el Libro de las Lamentaciones.

La afluencia masiva de visitantes se produjo después de casi dos semanas de tensiones que afectaron el sitio por el aumento de las medidas de seguridad, incluidos los detectores de metales, tras un ataque al Monte del Templo que dejó muertos a dos agentes de la policía de Israel y a tres gatilleros árabe-israelís.