El texto completo de la carta pastoral consta de seis páginas distribuidas en 48 parágrafos, pero en un resumen de la misma se puede destacar:

 

I) La oración lleva a la comunión con Dios.

Toda oración es un modo de conversación con Dios. Especialmente la “lectio divina”, lleva a la aplicación a la propia vida de las enseñanzas del Señor. Este método consiste en la lectura atenta de la Palabra, buscando imitar a Cristo.

 

II) La oración lleva a la comunión entre los cristianos.

Como expresa el mismo evangelio, cuando dos o más estén reunidos en el nombre de Cristo allí estará Él. El camino de la oración lleva a la comunión. Es Cristo quien nos une profundamente como hermanos y nos lleva hacia El.

 

III) Una espiritualidad de comunión.

Los dos capítulos anteriores confluyen en la espiritualidad de comunión. Hay estructuras de comunión: la familia, las instituciones sin fines de lucro, la parroquia, el Estado, etc.

Esta espiritualidad de comunión, en palabras del Papa Francisco tiene cuatro aspectos. El primero consiste en descubrir desde una mirada de fe que somos imagen y semejanza de un Dios trinitario que es comunión de personas: El padre, El hijo y el Espíritu Santo. La segunda nota radica en la capacidad de sentir a los hermanos en la fe, como presentes en el cuerpo místico de Cristo, en tener al otro como algo que me pertenece y a quien yo le pertenezco. La tercera nota se asienta en ver al otro como un regalo de Dios. El cuarto aspecto de la espiritualidad de comunión se halla en que los cristianos puedan mutuamente llevar la carga de los otros rechazando toda tentación de cerrarse en sí mismos.

 

IV) Lugares de comunión

En esta parte final del documento, Mons. Santiago analiza cinco lugares en los cuales se encuentran los cristianos y expresa el deseo de que en todos ellos reine la comunión.

 

a) La Diócesis: con cita del Documento de Aparecida (Brasil), el Obispo define a la Diócesis como ámbito privilegiado de comunión y misión, la que unida al Papa y a las demás Iglesias particulares, será la realización concreta del misterio de la Iglesia universal.

b) La parroquia: es el lugar donde la mayoría de los fieles tienen su experiencia inagotable de vivencia de la fe en el seno de la Iglesia.

c) La familia: sitio esencial donde se aprenden las primeras letras de la fe y de donde se suele encontrar el verdadero camino de santificación.

d) La escuela católica: ámbito en el que la persona desarrollará un proyecto de vida cristiano en el que habite el Señor con su poder transformador y dador de vida.

e) Las comunidades religiosas: como ámbito en el que se desarrolla el conocimiento de Dios y la vida fraterna.

 

Conclusión

 El Obispo concluye la carta con el párrafo número 43 en el que expresa “María de Pentecostés, madre de la Iglesia, ayúdanos a ser familia de Dios para el mundo. Amén”.