El peronismo se acerca a la unidad y Cambiemos busca un nuevo equilibrio electoral

El peronismo se acerca a la unidad y Cambiemos busca un nuevo equilibrio electoral

Durante la última semana eclosionaron todos los conflictos latentes que se habían manifestado en el oficialismo después de que se pusiera en duda la continuidad de Daniel Salvador como compañero de fórmula de María Eugenia Vidal en su intento reeleccionista.

 

La derrota de Carlos McAllister en la interna pampeana provocó un terremoto hacia adentro de la alianza de gobierno a nivel nacional y obligó al PRO a retroceder varios casilleros, algo que ya se había advertido que podría ocurrir cuando varios gobernadores de la UCR decidieron adelantar sus elecciones para evitar tener que compartir la boleta con Mauricio Macri.

En la provincia la última en echar nafta al fuego fue la propia Vidal cuando afirmó que los "vices" no estaban definidos, mientras que Salvador escuchaba atentamente y sin posibilidad de reacción. Los radicales, que consideran que la vicegobernación les corresponde por derecho propio, pusieron el grito en el cielo y todavía de forma silenciosa comenzaron la ronda de reclamos ante sus socios del PRO.

El único dato que llevó tranquilidad a los boinas blancas es que se confirmó lo que adelantamos en exclusiva en esta columna la semana pasada. Cristian Ritondo, uno de los principales rivales de Salvador para la vicegobernación, finalmente será candidato a diputado nacional para reemplazar en el Congreso a Emilio Monzó, por lo que ya no representa ningún riesgo para el radicalismo.

El plan de un sector de la Rosada era hacerle pagar al radicalismo de la provincia el atrevimiento de los gobernadores, pero la derrota pampeana obligó a revisar esos planes y a garantizarle mayores espacios al radicalismo, posiblemente también en la provincia de Buenos Aires.

Además, como daño colateral, cada vez más referentes del PRO admiten que podría habilitarse la competencia interna a través de las PASO en los distritos bonaerenses en los que no se logre definir candidatos por consenso, lo que representa una clara muestra de que para las elecciones de este año la "lapicera" no tendrá un único dueño en el oficialismo.

El peronismo mete presión por la unidad

"Estábamos todos", esa fue la frase que más se repitió después de la reunión del Congreso del PJ bonaerense en La Matanza, en la que participaron 752 congresales representando a todas las líneas internas del partido que además se manifestaron de acuerdo con la conformación de un frente electoral que incluya al kirchnerismo para las próximas elecciones.

Desde el oficialismo hicieron hincapié en la presencia de Hugo MoyanoMáximo Kirchner y Roberto Baradel, intentando mostrar a la reunión como un cónclave de la corrupción que solo busca garantizar la impunidad de sus principales dirigentes, pero la realidad es que el Congreso generó preocupación en Cambiemos por la asistencia de algunas figuras de sectores "dialoguistas" del PJ.

En ese sentido, se pudo ver a Emilio Pérsico, líder del Movimiento Evita; a Julio Zamora, intendente de Tigre; y a Pablo Garate, diputado de la sexta sección integrante del massismo, entre otros referentes de espacios otrora alejados del PJ oficial y del kirchnerismo. 

Es que según la mayoría de las encuestas que manejan en el PJ, si Cristina Kirchner fuera candidata y el peronismo de la provincia llevara un representante de unidad, la oposición estaría en condiciones de propinarle una derrota a Vidal a pesar de que sigue siendo la dirigente con mejor imagen tanto en territorio bonaerense como a nivel nacional.

Además, el tono conciliador se notó incluso días antes de la reunión del Congreso, cuando el presidente del partido, Fernando Gray, ratificó la intención de los intendentes de impulsar a un par como candidato a gobernador, pero sin cerrarle las puertas a Axel Kicillof, el postulando del kirchnerismo.  "Si no hay acuerdo se definirá en las PASO", adelantó el intendente de Esteban Echeverría.

En este escenario pierde fuerza Alternativa Federal en la provincia, a pesar de que los principales dirigentes nacionales de esa fuerza seguirán visitando distritos bonaerenses en las próximas semanas, siempre con la intención de apuntalar candidatos propios.  Para la semana que viene, por ejemplo, Miguel Ángel Pichetto volverá a La Plata y reforzará parte del armado que dejó Juan Manuel Urtubey tras su paso por la ciudad de las diagonales.

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