El “pueblo” de Sant’Egidio celebrará los 50 años de la fundación de la Comunidad en compañía del Papa Francisco. El director de la Sala de Prensa vaticana, Greg Burke, indicó hoy que el próximo domingo 11 de marzo, el Pontífice irá, a las 16.30, a la Plaza Santa María en Trastevere para celebrar con los miembros de la Comunidad fundada por Andrea Riccardi este medio signo que ha pasado al lado de los pobres, en oración y trabajando por la paz. 

  

El Papa, informó el sitio de la Comunità di Sant’Egidio, pronunciará un discurso a la Comunità en su sede y celebrará una liturgia de la Palabra. Durante el evento, Francisco tendrá la ocasión para un nuevo encuentro con representaciones de diferentes ciudades italianas y del mundo, con jóvenes y pobres amigos de la Comunità, entre los que habrá algunos prófugos que han llegado a Italia con los corredores humanitarios, ancianos, niños de las Escuelas de la Paz, personas con discapacidades de los talleres de arte, personas sin hogar acogidas en estructuras en estos días de frío. 

El pasado 11 de febrero, el cardenal Secrtario de Estado, Pietro Parolin, celebró el 50 aniversario con los miembros de Sant’Egidio en la Basílica de San Juan de Letrán.  

  

A poco tiempo de que concluyera el Concilio Vaticano II, la comunidad nació en 1968 en una escuela superior del centro de Roma, y esta realidad eclesial se ha convertido con el paso del tiempo en una red de comunidades que, en más de 70 países del mundo, tiene una particular atención por las periferias y los hombres y mujeres de todas las edades y condiciones, unidas por un vínculo de fraternidad en el Evangelio y en el compromiso voluntario y gratuito por los pobres y por la paz. 

  

La oración, basada en la escucha de la Palabra de Dios, es la primera obra de la Comunità, después están los pobres: la amistad con quien se encuentra en necesidades (ancianos, personas sin hogar, migrantes discapacitados, detenidos, niños de la calle y de la periferias) es el rasgo característico de la vida de quienes pertenecen a Sant’Egidio en los cinco continentes. 

  

Y para concluir están las misiones de paz, con la conciencia de que la guerra es la madre de todo tipo de pobreza; la Comunità trabaja incesantemente para reestablecer la paz en los países en donde falta, para protegerla donde está amenazada, para ayudar a reconstruirla, facilitando el diálogo en donde se ha perdido. El trabajo por la paz se vive como una responsabilidad de los cristianos, parte de un más amplio servicio a la reconciliación y a la fraternidad cuyo fundamento es el empeño ecuménico y el diálogo interreligioso en el “Espíritu de Asís”.