La Orden de Malta Argentina está ofreciendo a las Empresas con voluntad de Responsabilidad Social Empresaria la posibilidad de incluir sus logos en cartelería y páginas de publicidad del programa, con el objetivo de recaudar fondos para la finalización de la tercera etapa de la ampliación del Instituto Parroquial Virgen Inmaculada -IPVI-, que funciona desde 2015 y del cual este año egresarán los primeros bachilleres adultos -del turno noche con orientación comercial- que viven y estudian en la villa.

La construcción del primer piso es necesaria y urgente para dar respuesta a la gran demanda de vacantes para escolarización secundaria, que crece de forma exponencial en los barrios, teniendo en cuenta que el 48% de los jóvenes en las villas tiene menos de 17 años. Mayo de 2015, inauguración del Colegio Virgen Inmaculada.

El Arzobispo de Buenos Aires, Cardenal Mario Aurelio Poli, junto a la presidenta de la Orden de Malta Argentina María Podestá, y al párroco de Virgen Inmaculada, Pbro. Pedro Bayá Casal. Junto a la Capilla y al Club -CAVI-, el Colegio integra la tríada de formación espiritual e intelectual fundamentalmente preventiva denominada “Las Tres C”, que es la propuesta del Papa Francisco para la contención social en los barrios más humildes de la ciudad. Capilla, Colegio y Club bregan por la igualdad de oportunidades para el pueblo más pobre de la ciudad de Buenos Aires.

Las Tres C, gestionadas en las barriadas por los Curas Villeros, ofrecen la posibilidad de una vida digna para los niños, los adolescentes y sus familias que viven y trabajan en zonas de vulnerabilidad social. Los vecinos del barrio, que cargan historias difíciles de inmigración, exclusión y marginación, encuentran en esta tríada preventiva la oportunidad de construir una vida más plena, más libre y más feliz.

El IPVI funciona desde 2015, y al ser un colegio público de gestión privada no le cobra cuota a sus alumnos. Está focalizado en la educación secundaria, complementando así la escolarización de la población infantil que ya acude al Jardín de Infantes y a la escuela primaria del barrio. Se trata de un bachillerato en turno mañana, pensado para apuntalar a los adolescentes que viven en un contexto social de alto riesgo. La tarea del colegio, además de educativa, es preventiva, de inclusión y de promoción social. El bachillerato en turno mañana está orientado en artes visuales para que los adolescentes no solo reciban educación como una posibilidad de inserción laboral.

El objetivo es brindarles una formación más amplia e integral que el conocimiento de las materias curriculares obligatorias. La misión del Colegio es que los chicos aprendan a ejercitar una mirada creativa y llena de posibilidades, en un mundo que se les ofrece con dificultades de oportunidades y de crecimiento personal. El bachillerato nocturno está orientado en comercio, para darle a las madres y padres de las familias de los barrios la oportunidad de profesionalizar sus microemprendimientos, que mueven las economías populares y el consumo de los bienes básicos en las barriadas.

Con la construcción del primer piso será posible un óptimo funcionamiento del turno mañana y del turno tarde, además de poder desdoblar los cursos en A y B, para dar respuesta a la gran demanda de vacantes para escolarización secundaria, que crece de forma exponencial en los barrios, teniendo en cuenta que el 48% de los jóvenes en las villas tiene menos de 17 años.

Desde el Colegio, jóvenes y adultos son formados con la certeza de que sus vidas valen a los ojos de Dios y de la sociedad; de que su esfuerzo en el estudio les permitirá una mejor calidad de vida, y que la construcción comunitaria es el único camino para crecer y desarrollarse en una vocación, orientarse hacia la felicidad, la formación de una familia y una vida con sentido