El intendente Arroyo, acompañado por el Ministro del Interior, Rogelio Frigerio, recorrió la obra Arroyo del Barco. La misma se encuentra en un avance del 90% y beneficiará a 14 barrios de la zona sur de la ciudad en donde viven más de  140.000 vecinos, con el objetivo de evitar las inundaciones. El jefe comunal ya había estado en el día de ayer con el Ministro, a quien le dio la bienvenida en el Aeropuerto Astor Piazzolla y juntos recorrieron los camiones de documentación rápida que lleva adelante el Ministerio y refuerzan la Costa Atlántica como todos los veranos.

Esta obra, que representó una inversión de $ 247.629.806 ya lleva completados 752.30mts del conducto (cámara de desembocadura completa y un 70 % de empalme) y se prevé su finalización para el 25 de febrero próximo.

En este marco, el intendente Arroyo destacó que “tenemos todas las expectativas porque queremos asegurar el seguimiento de todas las obras previstas como son los desagües, como la segunda parte de esta misma obra que hoy estamos visitando y el circuito de 25 pozos que se están trabajando en este momento. En materia hidráulica se está trabajando muchísimo y queremos que estas obras se realicen, no solo por el bienestar de la ciudad sino también por las fuentes de trabajo que representan”.

Por su parte, Frigerio agregó: “Estas obras son fundamentales para los marplatenses, añorada desde hace muchísimo tiempo para evitar inundaciones y esperamos prontamente poder inaugurarla”.

                Actualmente, luego de los  30 sumideros nuevos que se hicieron en orden a la funcionalidad de la obra, se trabaja en la cámara de empalme (sector 2, que es el carril con dirección a Punta Mogotes).

                Desde Obras Santarias destacaron que la obra tendrá reflejo positivo sobre 14 barrios de zona sur  (Villa Lourdes, Puerto, Las Avenidas, Peralta Ramos Oeste, El Progreso, El Martillo, Florencio Sánchez, Cerrito Sur, Cerrito y San Salvador, Juramento, Gral. San Martín, Termas Huinco, Colinas de Peralta Ramos y Punta Mogotes), los que son contemplados en el marco del “Plan Nacional del Agua” como medida directa de acomodamiento a los extremos climáticos.El mismo caudal de  agua que hoy llega al puerto es el que  desaguará en el  conducto cuya construcción hoy progresa, con el agregado de que al ser más rápido su transporte no habrá inundaciones en los barrios aludidos evitándose paralelamente –con el sistema trazado- el traslado de residuos