El sábado por la tarde se celebraron las Fiestas Patronales en la Parroquia de Lourdes, por la mañana la festividad comenzó con la toma de posesión del nuevo Párroco José Luis Depascuale (Padre Kelly) con la presencia del Obispo Hugo Manuel Salaberry, quien presidió la misa cantada.

Así es que desde ese mismo día que el Padre Kelly se hizo cargo de la Parroquia.

Pero para saber más sobre esta toma de posesión y los proyectos que llevará a cabo el nuevo párroco EL TIEMPO lo entrevistó.

“Que la iglesia sea lo más misionera posible”

De esta manera recordó que “el obispo me dio la noticia hace seis meses, pasa que no se hizo público hasta hace muy poquito, yo hacía cuatro años que estuve en Catedral y cuando me informó de la noticia las emociones fueron y son, dobles. Porque por un lado duele dejar una comunidad que uno quiere y por el otro está dispuesto porque el sacerdocio es servicio”.

Agregó que “este año cumplo 25 años de sacerdocio y empecé en la comunidad de Catedral con el Padre Joaquín que decía ´lo más inestable de una comunidad es el sacerdote` (risas). Y de hecho después volví y mucha gente continuaba trabajando como al principio y seguimos…”

Insistió que “por un lado le duele dejar los afectos, las personas, no tanto porque uno está cerca, se queda en Azul; pero por otro uno que ve toda la diócesis y las necesidades del obispo si él lo decide ahí vamos”.

Consultado sobre cómo vivió la toma de posesión en la celebración de las Fiestas Patronales, expresó que “fue muy linda experiencia, una fiesta muy linda, hubo mucha gente de Catedral, mi familia, de Lourdes y con muchas expectativas, con el deseo de poder servir a la comunidad. Fue un día hermoso, con el deseo de poder servir a esa comunidad, tanto a la mañana cuando fue la toma de posesión como a la tarde, la procesión, la misa; la verdad que fue un día pleno, muy feliz”.

Sobre los proyectos que tiene para la Parroquia Depascuale contó que “nos reunimos con todas las fuerzas vivas de la comunidad y yo les dije fundamentalmente que uno viene a servir, tratar de sumar con el sacerdocio y además como la iglesia pide: tratar de fortalecer cuatro ejes”.

Asimismo enumeró que “el encuentro con Dios, con Cristo, las celebraciones; el segundo la formación bíblico-pastoral entonces vamos a ver si haremos un curso para catequistas para que ayude a formar a la comunidad; el tercer eje la comunión, uno ve a una familia y quiere afianzar ello, por ejemplo las Fiestas Patronales fueron una celebración muy familiar porque estaba el grupo de catequistas, el grupo de jóvenes. Estuvieron todos trabajando y por último es lo que el Papa Francisco nos pide insistentemente la misión. Cuando hablamos con la Madre Covadonga lo primero que me dijo es darle más fuerza a la misión y sí, que la Parroquia salga a misionar y la idea es hacer un grupo misionero con todas las fuerzas vivas de la comunidad. Que la iglesia sea lo más misionera posible, es lo que dice el Papa: ´prefiero una iglesia accidentada por salir que a una iglesia encerrada`”.

Otro de los desafíos que mencionó el sacerdote es acompañar a los sacerdotes que están enfermos porque en la parroquia se abrirá una casa para los sacerdotes enfermos o mayores.