La fiesta comenzó al mediodía con la presentación de shows de danzas de las distintas colectividades: libanesa, griega, búlgara, cubana y brasileña, entre otras. Además estuvieron presentes los coros de Caacupé, Amijai, el coro IPA, Soka Gakkai, Místicos, Los Pirkas, Maxi Larghi y numerosos  stands de gastronomía típica y de las distintas instituciones religiosas.

La gente se acercó a disfrutar de la comida, los espectáculos y la música. El cierre musical estuvo a cargo del grupo folklórico Los Huayra que hizo bailar al público que los esperaba desde temprano.

El momento más emocionante de la jornada fue cuando los líderes religiosos junto a los funcionarios  subieron al escenario para dejar formalmente inaugurado el espacio.

“Este es un día y un espacio que celebra lo mejor de Buenos Aires: la convivencia de quienes profesamos creencias diferentes, tenemos historias distintas pero convivimos en una ciudad común“,  señaló Fernando Straface, Secretario General de la Ciudad. Straface expresó también la enorme satisfacción de todo el gobierno de la Ciudad  por celebrar esta fiesta junto a  los líderes religiosos de las diferentes comunidades. “Agradezco y celebro la presencia de todos ustedes que representan esa convivencia en la diversidad  que se vive todos los días en nuestras calles, en nuestros bares y de la que los argentinos tenemos que estar orgullosos.“

El senador, Federico Pinedo, estuvo también presente acompañando la inauguración del espacio. Enrique Avogadro, ministro de Cultura de la Ciudad y Pamela Malewicz, Subsecretaria de Derechos Humanos y Pluralismo Cultural de la Ciudad fueron otros de los funcionarios que se acercaron a participar de la fiesta del encuentro. “La coexistencia en términos religiosos y la diversidad cultural que conviven en esta ciudad es motivo de orgullo para todos lo que vivimos en esta Argentina maravillosa”, expresó Malewicz. 

Por su parte, Federico Pugliese, Director de Culto de la Ciudad remarcó “Realmente lo que estamos viviendo hoy es un sueño que empezó como un proyecto común, un sueño que fuimos concretando junto a los protagonistas de todo esto que son los que están aquí conmigo en el escenario: los representantes de las comunidades.” A continuación pidió un aplauso para todos los líderes religiosos que se encontraban presentes.

”Esto es ejemplo de diálogo, de que nos podemos sentar en una misma mesa y trabajar juntos,” finalizó Pugliese con emoción.