En un artículo publicado  en el Wall Street Journal, el cardenal Timothy Dolan, arzobispo de Nueva York, lamentó que los principios cambiantes del Partido Demócrata hayan excluido y alejado a los católicos ortodoxos.

Dolan dijo que la actual oposición del Partido Demócrata a programas de elección de escuela y créditos fiscales para educación, así como su inquebrantable apoyo al aborto, son las razones por las que los fieles se sienten decepcionados con ese partido político.

El arzobispo neoyorkino dijo que cree que los demócratas de hoy han abandonado muchos de los principios que hicieron que el partido fuera atractivo para los católicos, generaciones atrás.

En el pasado, explicó, cuando olas de inmigrantes irlandeses llegaron a los Estados Unidos, su respeto por la santidad de la vida y su preocupación por los pobres los llevó a sumarse al Partido Demócrata, que los acogió. Y relató que su propia abuela le decía: “Nosotros, los católicos, no confiamos en esos republicanos”.

“Ese ya no es el caso”, comentó Dolan, y consideró que eso es “causa de tristeza para muchos católicos”, incluido él.

En abril del año pasado, el presidente del Comité Nacional Demócrata, Thomas Pérez, dijo en un comunicado que “todos los demócratas, como todos los estadounidenses, deberían apoyar el derecho de una mujer a tomar sus propias decisiones sobre su propio cuerpo y su salud”, y aseguró que esto era “no negociable”.

Encuestas recientes muestran que menos de un cuarto de los demócratas creen que el aborto debería ser ilegal en todas o en las mayorías de las circunstancias.

Dolan también ha sido particularmente crítico con la propuesta de ley en Nueva York titulada “Ley de Salud Reproductiva”, la cual “ampliaría mórbidamente” la “licencia de aborto más radical en el país”. La Asamblea Estatal de Nueva York es mayoritariamente demócrata.

“Por ejemplo, bajo la propuesta Ley de Salud Reproductiva, los médicos no estarían obligados a atender a un bebé que sobrevive un aborto. Al recién nacido simplemente se le permitiría morir sin ninguna implicación legal”, escribió el cardenal.

Además, explicó, los demócratas estarían haciendo cada vez más difícil que niños de clase media y baja puedan acceder a educación en una escuela católica.

“En años recientes, algunos demócratas en la Asamblea Estatal de Nueva York bloquearon repetidamente una legislación de créditos fiscales para educación, que habría ayudado a familias de medios y bajos ingresos hagan la elección de seleccionar escuelas católicas y otras no públicas para sus niños”, dijo.

El purpurado indicó que este tipo de legislación impide la misión de estas escuelas de servir a los pobres, a menudo inmigrantes y niños.

La prominente figura del catolicismo estadounidense señaló que si bien ha “tenido disputas y decepciones” con políticos de los dos partidos más grandes de Estados Unidos, está particularmente molesto por el giro del Partido Demócrata en una dirección que excluye a gente como su abuela.

“Pero me entristece, y debilita la democracia que millones de estadounidenses atesoran, cuando el partido que una vez abrazó a los católicos, ahora nos cierra la puerta”, escribió.