"Divididos, va a perder el pueblo"

El diputado nacional y exgobenador dialogó con La Tecla sobre el año electoral. Asegura que el “debate histórico ya pasó” y que se concentrará en buscar la unidad del peronismo.

En la confitería del hotel Hemritage, frente a la costa de Mar del Plata, Daniel Scioli accedió a una entrevista exclusiva con La Tecla el mismo día que festejó su cumpleaños y presentó su libro El otro camino.

En un presente comprometido con la actualidad política y económica del país, el exgobernador quiere volver a sumarse a la carrera presidencial y, así, reeditar la pelea electoral de 2015. 

Consultado sobre el reciente conflicto con su pareja, Gisela Berger, el ex mandatario bonaerense prefirió no opinar al respecto y aseguró que al tema lo manejará exclusivamente con su abogada. 

-¿Está decidido a volver a pelear por la Presidencia este año?

-Estoy decidido, en un primer paso, a buscar consensuar con toda la diversidad de los sectores opositores. Hice una agenda de trabajo, con iniciativas que tienen que ver con la reducción de impuestos; la recuperación del salario y del poder adquisitivo de las jubilaciones, que han quedado por debajo de la inflación; la situación de las tarifas, que han golpeado muy fuerte, no sólo a la economía familiar, sino a las Pymes, a los sectores populares, a los teatros y a los clubes de barrio. Estoy planteando también el rol del sistema financiero, que en este último tiempo ha estado al servicio de la especulación, no de la inversión productiva. Hay que integrar el sistema financiero, la educación y el trabajo. Las nuevas tecnologías avanzan sobre los puestos de trabajo tradicionales. Es necesario educar en estos nuevos puestos de trabajo y en la matriz productiva del país. El sector de los alimentos: tenemos que hacer realidad alimentos accesibles. En los países productores de petróleo vale más un litro de agua que de nafta. Si nosotros producimos alimentos para 600 millones de habitantes y si vamos en camino a una cosecha récord, el desafío que tenemos es agregarle valor.

-¿Considera que su figura puede aglutinar a diferentes sectores políticos detrás de ese programa?

-Desde este diagnóstico, anteponiendo los intereses y la necesidad de la mayoría del pueblo argentino, de buscar una opción, una alternativa y una salida. Me quiero concentrar en eso, no en describir realidades obvias, no hacer referencia a aquel debate histórico. Eso ya pasó. En aquel entonces advertí que había dos maneras de solucionar los problemas: el camino del ajuste o del desarrollo. Tenemos que tener presente que los problemas que estaban vigentes, como la inflación y la pobreza, se han agravado como consecuencia de estas políticas. No dudo de la buena voluntad de quienes llegan a ocupar las más altas responsabilidades del Estado, lo que creo es que es un mal plan económico, que ha generado una mayor concentración de desigualdades que se ve reflejada en distintas cuestiones. 

-¿Cómo ve posible la unidad del peronismo hoy, con tantos candidatos que se largan a la carrera presidencial y ninguno quiere bajarse? Empezando por Cristina…

-Veo algunas decisiones esperanzadoras. Por ejemplo: el caso de San Juan, donde José Luis Gioja logró la unidad. Si Cambiemos pudo construir una alianza electoral con distintas fuerzas políticas con mayores distancias de las que podemos tener, nosotros tenemos que tener la capacidad y la responsabilidad para unirnos para defender a la gente y sacarla adelante. Ocurrió en Tierra del Fuego y en La Pampa. Hay ese espíritu, que no tiene que quedarse, obviamente, en lo discursivo, sino que tiene que bajar a la realidad, en donde hay que profundizarse cada vez más. Divididos, va a perder el pueblo argentino la posibilidad de implementar los cambios necesarios para poder reorientar el esfuerzo al crecimiento.

-¿Ve a Cristina como candidata a Gobernadora?

-Creo que ella y tantos otros dirigentes que están trabajando en la vocación de conducir el país están primero abocados en generar las condiciones para que haya una unidad en la diversidad de los distintos sectores. Más allá de si es candidata o no, evidentemente, no se puede desconocer el respaldo que tiene, y que, candidata o electora, tiene mucha gente que tiene muy presente que había políticas que le defendían el salario, con las que tenía la heladera llena, con las que se podía tomar vacaciones y tener aire acondicionado. Ahora, la gente también vota para adelante. Los éxitos del pasado no garantizan éxitos en el futuro. Nos tenemos que exigir poner todo el esfuerzo en una iniciativa que genere confianza y certidumbre. Ahí es donde debe prevalecer la responsabilidad. No se trata de ir en contra de, sino a favor de la gente que la está pasando mal. Fundamentalmente de la clase media, de quienes depende la suerte económica de las Pymes. Cuando recuerdo cómo le cancelamos al FMI, fue a través del crecimiento. Algunos se plantean en este momento qué hay que decirle al FMI. ¿Que reestructuren la deuda? No, que nos ayuden a crecer. No necesitamos más plata y que nos condicionen el futuro. También tenemos que dar certidumbre a quienes han invertido bajo estas reglas del juego, en Vaca Muerta, en las energías renovables. No puede ser que en Argentina, siempre tengamos que volver a empezar.

-¿A quiénes ve como candidatos posibles en la Provincia?

-Si se llega a dar que se desdoblan las elecciones y se eliminan las PASO, va a haber que hacer un esfuerzo mayor por tener una unidad opositora que sea superadora y plantee una agenda en la Provincia que pueda estar en sintonía luego con lo que ocurra a nivel nacional. Algunos han expresado su voluntad, pero primero están esperando estas definiciones. 

-Más allá de que desde todo el espacio político se está esperando a ver qué sale de la Comisión Bicameral, ¿no cree que el tiempo electoral ya le demanda al peronismo que empiece a plantear uno o dos candidatos?

-Sí, y es más, si hay un espacio que se ha mantenido unido, es el peronismo de la provincia de Buenos Aires; y eso es un gran mérito. Primero, con la presidencia de Gustavo Menéndez, hasta que tomó la posta, con el compromiso que tenía, Fernando Gray. Es un hombre que tiene una gran capacidad de gestión, de unir y convocar. Realmente está generando un mensaje muy claro, marcando también el otro camino en la provincia de Buenos Aires. 

-Dijo que quería ser superador del debate presidencial de 2015. Si tuviera que mencionar cinco propuestas para la Argentina que se viene, ¿cuáles serían?

-Una reestructuración y reducción de los impuestos; esta superposición de impuestos provinciales, municipales, nacionales que superan el 50 por ciento quitan competitividad y capacidad productiva. Llegar al equilibrio fiscal es una medida sana desde el punto de vista de la salud de las cuentas públicas, pero el tema es cómo se llega. Si una persona que está con obesidad quiere adelgazar, tiene dos maneras: le das una dieta nutritiva o le decís que no coma más. Obviamente, si no come, adelgaza, pero queda desnutrida. A la Argentina hay que darle anabólicos de crecimiento, proteínas que tienen que ver con la recuperación del salario, que ha perdido con respecto a la inflación. Hay que desdolarizar las tarifas y aplicar en forma gradual y segmentada los aumentos que han implementado. El rol de la banca pública, con este nivel de tasas de interés, no promueve el consumo ni la inversión productiva. Ha generado un deterioro permanente. Poner en marcha una defensa racional de la industria nacional, porque con una economía liberal vas en contra del mundo. Además, poner todo el esfuerzo en políticas activas en la expansión de un sector clave como la construcción. Había un programa de viviendas que se había anunciado y hoy vemos cómo ha caído la construcción, el mundo automotor, la industria textil. 

“Hay que dar el debate, no se puede estar siempre en elecciones”

-¿Qué opina del desdoblamiento de elecciones que propone el gobierno de María Eugenia Vidal?

-Hace tiempo vengo pensando que Argentina se tiene que dar el debate de que no se puede estar permanentemente en elecciones, ya sea con las desdobladas o con las PASO obligatorias. En algún momento hay que consensuar hacia el futu-ro; poder votar todo junto y cada cuatro años, para que todo el esfuerzo sea puesto en gobernar y que no se esté mezclando la campaña con la gestión. Estamos en enero y en los meses próximos ya tenemos varias elecciones provinciales. Buenos Aires late al ritmo de las políticas nacionales. El debate a fondo se va a dar sobre qué modelo económico queremos tener de ahora en más.

-¿Le parece que con estas reformas electorales hay aprovechamiento de parte del Gobierno bonaerense para buscar una ventaja?

-Puede haber divisiones. En definitiva, en la elección presidencial, con lo que ocurrió, que luego se vino el balotaje, no fuimos desdoblados y ganamos. Vidal ya había sido electa Gobernadora y la elección del Presidente contra mí fue una puntual. Desde lo electoral, puede tener la lectura de que es mejor que vayan juntos, así se potencian uno al otro. Y también puede tener otra visión de, en caso de desdoblar, poder dar el debate con la Provincia y, así, el oficialismo ganar más chances. 

El otro camino y un repaso sobre la vida de Scioli

-¿De qué trata el libro El otro camino?

-Es el fruto de conversaciones que he mantenido con el escritor Rubén Tizziani, de trabajo de muchos meses, que me ha permitido repasar lo que ha sido para mí la experiencia del deporte, las adversidades, de las derrotas como aprendizaje. La vida es un aprendizaje constante. Como organización de un equipo, cómo ha sido mi ingreso a la política en 1997, las razones que me motivaron a eso, la experiencia de vivir en un barrio con marginalidad y problemas de drogas, como el barrio del Abasto en su momento. Cómo llegué a la vicepresidencia con Néstor Kirchner, desencuentros y encuentros con una visión estratégica, con la idea de industrializar el país. Cómo llego luego a la Gobernación con el gran hombre que fue Alberto Balestrini. Cómo fue la experiencia con el primer y segundo mandato; cómo llegué a la candidatura presidencial; la referencia al debate; luego asumir la derrota y bregar por la paz social. Con el dolor que representaba, no sólo por lo personal. Hasta que llegamos al resultado de todos los relevamientos que he hecho, con charlas con gobernadores, organizaciones gremiales, y los puntos centrales del otro camino. 

“Vidal está trabajando para poder atenuar esta situación”

-¿Cómo ve a Vidal?

-La veo trabajando para poder atenuar esta situación y tratando de articular con el Gobierno nacional una complementación que se vea reflejada en la política para poder tener la ayuda necesaria para poder llevar adelante su trabajo. Quien ha estado en ese lugar tiene que opinar con conocimiento. Las demandas son muchísimas, y vemos cómo, inclusive en temas que se me cuestionaban, como la falta de días de clases, son temas que se dan; o la seguridad; las inundaciones con el cambio climático; los reclamos sociales. En ese sentido, la Provincia necesita trabajar con la mayor armonía posible con el Gobierno nacional.

-¿Qué opina sobre funcionarios de la Provincia, y hasta incluso de la propia Vidal, que sostienen este discurso de la pesada herencia?

-Nunca he querido entrar en debate porque creo que el que gobierna tiene que tener el espacio para poder llevar adelante su agenda de trabajo. También tengo que, por respeto a la gente que me votó, en la reelección fui el Gobernador mas votado de la historia, tuve un reconocimiento. Y también en las elecciones presidenciales; incluso cuando ganó Vidal yo volví a ganar en la Provincia. Había un reconocimiento claro de qué manera cuidé a los comerciantes, nunca dejamos a las paritarias por debajo de la inflación, y ese crecimiento se vio reflejado en que la Provincia tuvo la tasa más baja de desocupación, de endeudamiento y de mortalidad infantil. Incluso con asignaciones pendientes y múltiples demandas. Siempre hay cosas por mejorar y por hacer. Ojalá que, por el bien de los bonaerenses, ella lo pueda hacer. 

La causa de los cuadernos y la política, al banquillo

-¿Que opina de la judicialización de la política? Sobre todo, en la causa de los cuadernos.

-En este tiempo que se viene, no debe judicializarse la política, ni politizar la Justicia. Esto no significa que quienes hayan tenido responsabilidades no tengan que dar las explicaciones en cada caso, y la Justicia, con independencia, pueda llevar adelante su tarea con su responsabilidad constitucional. Es mi visión de lo que debe ser el fortalecimiento institucional de la Argentina, inspirado en la Provincia con los organismos de control en manos de la oposición.

-¿Cree que hay una utilización política del aparato judicial para perseguir a opositores?

-No quiero sumarme a esas declaraciones. Quiero tratar de ir por la positiva. Planteo las cuestiones de fondo. 

“Berni es el mejor candidato a gobernador para la Provincia”

Luego de la entrevista con La Tecla, quien se acercó a saludar a Daniel Scioli por su cumpleaños 62 fue el senador provincial Sergio Berni, y el exgobernador no dejó de 

elogiarlo. “Este es un número uno. Médico, abogado, un hombre con experiencia de gestión”, fue la bienvenida de Scioli antes de estrecharse en un abrazo y recibir de parte del legislador un mate con la inscripción “Sergio Berni Gobernador 2019”.

“Es un hombre capacitado, con experiencia, con formación social para la Provincia”, agregó Scioli, para rematar con una frase contundente: “Berni es el mejor candidato a Gobernador que puede tener la provincia de Buenos Aires”. Para ratificar sus elogios, Scioli dijo que Berni es su candidato a la gobernación bonaerense.

A favor de debatir la responsabilidad penal juvenil

-¿Cómo ve la baja de edad en la imputabilidad para los chicos de 15?

-Voy a ser coherente con lo que planteé en su momento. Estoy a favor de debatir un régimen penal juvenil que está marcado también por la Convención Nacional de los Derechos del Niño, para que tengan su reinserción, su debido proceso. Está cambiando la forma del delito, esta combinación de drogas y armas. El Estado debe readecuarse, sobre todo cuando tenemos una ley de la dictadura. Más allá de la oportunidad, son temas que hay que debatir.

“Mar del Plata es una ciudad muy sensible a las crisis económicas”

-¿Cómo ve a Mar del Plata?

-Es un electorado muy exigente, muy sensible a las crisis. En 2001 fue la ciudad que tuvo mayor índice de desocupación, con contextos políticos muy particulares. En Mar del Plata se necesita una complementación permanente con el Gobierno nacional y provincial para ponerla a salvo de las consecuencias. Es una ciudad que tiene al turismo como eje central. La gente, hoy viene, pero consume menos; se ve reflejado en los teatros, en los comercios. A Mar del Plata tenemos que darle la oportunidad de tener una alternativa consolidada que les explique un programa puntual. En el lugar donde esté es una ciudad que marcó mi vida para siempre. Uno viene acá, sale a correr a la mañana, se mete en el mar y se encuentra con familias de todo el país; esto permite tener un diagnóstico claro. Lo que hice fue reafirmar estas ideas que reflejé antes. Ahora tengo más tiempo para leer y para poder pensar sobre estas cuestiones.

-Tiene muy presente a la política local. ¿A qué candidatos ve en el peronismo?

-Creo que tienen que ir en un frente. El peronismo por sí solo, sin ninguna otra opción, no va a poder alcanzar la victoria de la gente. No quiero hablar de partido político, la victoria es de la gente, que pueda revertir esto. Para eso hay que demostrar solidaridad, responsabilidad, y no anteponer ninguna aspiración personal por sobre las necesidades del conjunto.

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