El obispo diocesano, monseñor Luis Urbanc, celebró varias misas con distintos grupos de la comunidad. El jueves 1 de diciembre participaron de la Eucaristía y rindieron su homenaje miembros del Ejecutivo provincial y municipal de la capital y del interior de la provincia con sus gabinetes. En la celebración eucarística el prelado explicó que Jesús “con su testimonio de vida nos hace conocer quién es Dios y lo que espera de nosotros”, pero que no se trata sólo de una “doctrina atractiva”, sino de un seguimiento y un compromiso: hacer vida los valores del Reino. 

“No basta la devoción, la asistencia a misa, novenas, procesiones o incluso las obras de misericordia, si todo ello no está basado en el cimiento inconmovible del Dios amor, que nos hace acercarnos de corazón al hermano que sufre… Nuestro mundo en crisis y lleno de contradicciones está ávido de este testimonio por parte de los cristianos”, aseveró el obispo.

Al día siguiente, viernes 2 de diciembre, participaron de la novena fieles del ámbito del transporte y las comunicaciones. En su homilía, Monseñor Urbanc afirmó que “Adviento es el tiempo de acrecentar en nuestros corazones el deseo de Dios”, y destacó la especial importancia de la oración durante esos días. 

Asimismo, los jóvenes catamarqueños compartieron su celebración, concelebrada además por el presbítero Diego Manzaraz, asesor de la Pastoral de Juventud, el sábado 3 de diciembre, quinto día de la novena. 

El obispo de Catamarca invitó a los jóvenes “a que entiendan que el cristianismo no es un código de preceptos y prohibiciones”. “Muchos de ustedes tienen la impresión de ahogarse en un ambiente de moral imperativa y no son pocos los que echan por la borda esta pesada mochila”, lamentó el Pastor diocesano. 

“Habitúense a orar y a beber en la fuente de la Penitencia y de la santísima Eucaristía lo que la naturaleza no les puede dar: la fuerza de no caer, la fuerza para levantarse. Que ya desde jóvenes, sientan que sin la ayuda de esta energía sobrenatural no conseguirán ser ni buenos cristianos, ni hombres honestos, a quienes esté reservado un sereno vivir. Y así preparados, podrán aspirar igualmente a lo mejor”, aseguró.

Por su parte, los servidores del santuario de la Madre del Valle celebraron la novena junto al rector de la catedral basílica y santuario mariano, presbítero José Antonio Díaz, el domingo 4 de diciembre. En su homilía, el sacerdote reafirmó que el tiempo de Adviento nos invita a la conversión “desde una situación de pobreza”. 

“Sobre este tema tenemos que profundizar en este tiempo porque no vamos a cambiar el mundo desde las seguridades, desde la opulencia, desde el poder temporal, sino desde la pobreza para tener no sólo una mayor libertad como Iglesia, sino -sobre todo- un mayor impacto en la sociedad porque sólo desde la pobreza se puede ser auténtico”, señaló. 

Homenaje de los empleados de Comercio y miembros del club Autos de Época 

Además, ese mismo día, honraron a la Madre del Valle miembros de la Cámara de Comercio, el sindicato de Comercio, el Centro de Empleados de Comercio, asociaciones automovilísticas y el Club de Autos de Época. El obispo catamarqueño presidió la misa, concelebrada por el capellán del santuario, presbítero Diego Manzaraz. 

En su homilía, el prelado exhortó a “no tener miedo a romper con un negro pasado”. “Cristo siempre busca nuestro bien y prepara nuestra vida para servir mejor a los demás”, afirmó e invitó a “preparar nuestro corazón con una sincera y sostenida penitencia para recibir a nuestro Rey, que no viene a imponer cargas, como hacen los poderosos de este mundo, sino a liberarnos, darnos su amor y su vida eterna”. 

“Todos necesitamos convertirnos, poner toda la atención en Dios, hacer examen de conciencia con rigor y entrar en disciplina que permita un cambio de vida”, concluyó.

En la tarde de hoy, lunes 5 de diciembre, le rendirán homenaje a la Virgen agrupaciones y artistas folclóricos con una misa que se celebrará a las 19, en la catedral basílica. Luego, a las 21, participarán de la Eucaristía miembros del ámbito estatal de la cultura (provincial, municipal) y privado (SADE, Junta de Estudios Históricos, Salac, Damas Belgranianas, Instituto Sanmartiniano y de Cultura Hispánica, y demás instituciones culturales y artísticas); escuelas de arte (EVEA, conservatorios de música, escuelas de teatro y artes plásticas); bibliotecas públicas; museos; pueblos originarios y colectividades del medio (asociaciones, consulados).