“Conozco casos en los que la justicia no ayudó nada”

“Conozco casos en los que la justicia no ayudó nada”

El arzobispo Cargnello justificó por qué no se derivaron las denuncias contra el cura Agustín Rosa a la justicia ordinaria.

 

 

Requerido por la prensa para informar la postura oficial de la Iglesia ante las denuncias por abuso sexual gravemente ultrajante contra el cura Agustín Rosa, el arzobispo Mario Cargnello conversó con el portal web La Gaceta Salta y justificó por qué no derivaron las denuncias (recibidas en el mes de abril) a la justicia civil. “En Argentina, estas cosas no tenemos la obligación de transmitirlas a la justicia civil, en cambio en otros países sí” dijo y advirtió que “el marco te lo da la ley civil”.  Más aún, Cargnello, máxima autoridad de la curia salteña, planteó que “conozco casos en los que la justicia no ayudó nada”. La semana última, con frases enrevesadas, el presbítero respondió las preguntas del portal web y aseguró que “frente a un hecho así, de tal fuerza y de dolor que produce, porque uno ve quiénes son los protagonistas, pero también la gente que quedó herida, no solamente la parroquia sino también la diócesis, y más allá de la diócesis, nos preguntamos y le pedimos a Dios que nos perdone por nuestros pecados, por nuestras faltas. Y no siempre estamos diez puntos”. A continuación la entrevista publicada, en texto y video, por La Gaceta Salta dónde Cargenllo omite cualquier mención a las víctimas y denunciantes de Rosas. ¿Cómo son los procedimientos judiciales dentro de la Iglesia y por qué la institución no comunica este tipo de casos a la justicia ordinaria? Normalmente nosotros hemos manejado las cosas dentro de la justicia ordinaria de la Iglesia con las sanciones si es que fuera declarado culpable que son eclesiásticas. En Argentina, estas cosas no tenemos la obligación de transmitirlas a la justicia civil, en cambio en otros países sí. El marco te lo da la ley civil. ¿Y usted qué considera de esta situación?, ¿creen que la justicia podría ayudar a esclarecer tanto la culpabilidad o la inocencia de los acusados? Yo no puedo decir como principio, porque conozco casos en los que la justicia no ayudó nada. Que nosotros hemos procedido y la justicia civil no. Cómo principio, si ayuda o no ayuda, no lo sé. Porque ahí entran también las circunstancias. ¿Es una justicia rápida, eficaz? Yo ahí entendí, no en este caso, sino en otros, lo que se hablaba en Santo Domingo de una justicia largamente esperada y cuando es así termina siendo injusticia. ¿Cómo va a acompañar la Iglesia al padre Rosa? Tengo que interesarme bien por la salud, ahora hablaré con los hermanos y ver si tiene su abogado y qué es lo que necesita. Eso tenemos que prever y para la Iglesia no es una parte contra otra, porque son hijos unos y otros. ¿Pero lo va a acompañar con abogado o eso ya corre por cuenta de Rosa? Depende de cada caso. No sé qué va a pasar, no he hablado, si esto ha saltado anoche(por el miércoles), recién estoy tratando de arrancar con el día. Ha habido casos en donde los curas dicen “no, yo tengo mi abogado” y tenemos que respetar.  ¿Hay autocrítica por parte de usted como cabeza de la Iglesia de Salta? Yo creo que sí. Quizás me falte, eso lo sabe Dios si es correcto o no. Yo trato de ponerme en su presencia y uno se pregunta “qué no hice que podría haber hecho”. Para eso nos entrenan, desde chicos aprendimos el ejercicio del examen de conciencia por lo tanto estamos normalmente preguntándonos “qué hice mal y en qué debo mejorar”. Frente a un hecho así, de tal fuerza y de dolor que produce, porque uno ve quiénes son los protagonistas, pero también la gente que quedó herida, no solamente la parroquia sino también la diócesis, y más allá de la diócesis, nos preguntamos y le pedimos a Dios que nos perdone por nuestros pecados, por nuestras faltas. Y no siempre estamos diez puntos. Hay algunas fallas que son defectos, o lentitudes, o no haber hecho lo justo u omisiones por los cuales se pide perdón al Señor. Ahí estamos, porque ¿qué se espera de estos momentos? Que se esclarezca la verdad y que se obre con justicia. Como esto está en el ámbito civil, no podemos más que esperar a la justicia, porque yo no puedo meterme ni influir. Hablan de la separación de la Iglesia del Estado y esto es un momento concreto en el que la Iglesia, como institución respetuosa de las leyes del Estado, se somete a la justicia.

Comentá la nota