"Más por Menos" significa ayudar para que la Iglesia pueda llegar a todos con su mensaje de vida y su amor solidario. Sin excluir a nadie, esta colecta pretende ser un instrumento más para fortalecer con recursos la convocatoria a todos a asumir la Buena Noticia del Evangelio en una vida pastoral y comunitaria que ayude a formar ciudadanos responsables, honestos y justos.

Organizada por la Comisión Episcopal de Ayuda a las Regiones Más Necesitadas, las obras que apoya "Más por Menos" ayudan a paliar las dificultades de gran parte de la población del interior del país, especialmente aquella que se encuentra marginada en las zonas más pobres. Por eso, es un puente de comunicación entre los que más tienen y los que tienen poco (o nada).

Fernando Maletti, obispo de Merlo-Moreno y miembro de la Comisión de Ayuda a las Regiones Más Necesitadas animó a los argentinos "a continuar la tarea de considerarnos como hermanos" Y agregó: "Si bien existen motivos de sobra para desanimarnos y hay realidades que nos hacen sentir en deuda permanente, creemos en el amor porque estamos llamados a ser testigos del amor, y siempre podemos amar más".

Creada en 1970 en la Asamblea Plenaria de Obispos de la Conferencia Episcopal Argentina por iniciativa de monseñor Jorge Gottau -entonces obispo de Añatuya (una de las diócesis más pobres del país), quien se inspiró en las colectas alemanas Adveniat y Misereor-, fue él quien pensó que en la Argentina se podía hacer algo similar, promoviendo una ayuda de las zonas más ricas hacia las más pobres. Por eso el lema básico de la colecta es camino de comunicación entre los que tienen más hacia los que tienen menos.

"El año pasado hemos logrado un incremento de más del 50% de la colecta con relación a la edición anterior,  lo cual marcó un record en su historial" afirmó monseñor Adolfo Uriona, obispo de Añatuya y presidente de la Comisión de Ayuda a las Regiones Más Necesitadas. ¿Lo recaudado? $21.130.195,97 con un aporte de $0,53 per cápita. Entre las diócesis que más aportaron figura Buenos Aires ($2,09), San Isidro ($1,26), Cafayate ($1,10) y San Francisco ($0,96); entre las que menos, Córdoba, Mendoza y Lomas de Zamora promediaron los $0,30 per cápita.

"Este incremento en la colecta brindó la posibilidad que se aumentara considerablemente la ayuda a las diócesis más necesitadas y también se pudieran aprobar más proyectos de las diócesis llamadas `menos necesitadas´ las cuales igualmente cuentan con importantes zonas de pobreza", reflexiono Uriona.

En una Argentina donde hay una profunda inequidad con muchos recursos por un lado y muchas necesidades por el otro, esta colecta es un gesto que busca que estas dos realidades puedan encontrarse.