Seis de cada diez chilenos consideraron "positiva" la visita que el Papa Francisco hizo al país la semana pasada, pero un 74 por ciento rechazó la participación en los actos del obispo acusado de encubrir abusos sexuales, según una encuesta difundida el lunes.

De acuerdo con el sondeo de la consultora "Cadem Plaza Pública", mientras el 61 por ciento cree que la visita papal estuvo "bien" o "muy bien", la cuarta parte de los encuestados opinó que estuvo "mal" o "muy mal" y un 12 por ciento que estuvo "regular".

En relación al obispo de Osorno acusado de encubrir abusos eclesiásticos, Juan Barros, un 74 por ciento consideró "negativa" su participación en las tres misas masivas que encabezó el Papa, y sólo un 14 por ciento estuvo de acuerdo con su presencia.

Barros es uno de los religiosos formados por Fernando Karadima, un influyente párroco de un sector pudiente de Santiago que fue separado del ministerio sacerdotal y condenado a una vida de "enclaustramiento y oración" por la Justicia canónica, tras comprobarse que durante muchos años había abusado sexualmente de niños y adolescentes.

La justicia chilena también encontró culpable a Karadima, pero no lo condenó por estar sus delitos prescritos, mientras algunas de sus víctimas denunciaron "encubrimiento" de parte de sus más cercanos, entre ellos Barros, designado en 2015 como obispo de la sureña ciudad de Osorno.

Una encuesta anterior de Cadem Plaza Pública realizada en junio de 2017, cuando se anunció la visita del Papa a Chile, indicó que un 71 por ciento la consideraba "positiva" o "muy positiva", es decir, diez puntos más que ahora, mientras que la valoración negativa aumentó del 12 al 25 por ciento.