Chau Trapitos y limpiavidrios: Larreta va a usar la mayoría en el recinto para prohibirlos

Chau Trapitos y limpiavidrios: Larreta va a usar la mayoría en el recinto para prohibirlos

La Comisión de Justicia de la Legislatura porteña ya firmó el despacho para reformar el Código de Contravenciones de la Ciudad. Entre los cambios, es la prohibición de la actividad de los cuidacoches y se sancionará a los limpiavidrios. Una ley que Macri no logró aprobar durante su gestión en la Ciudad.

Insistente con los proyectos que en su momento quedaron en el tintero por falta de votos en la Legislatura, el Gobierno porteño, hoy con mayoría propia, firmó el despacho para que en la última sesión del año se modifique el Código Contravencional de la Ciudad. Esta vez, la propuesta del Ejecutivo realza la perspectiva de género y crea nuevas figuras contravencionales (la figura de los limpiavidrios hoy ni siquiera existe en el Código Contravencional, se la incluirá justamente para sancionarla.). Además incorpora la denuncia anónima y la posibilidad de arresto, al tiempo que agrava sanciones, como multas y trabajo de utilidad pública.

Una vez, más el jefe de gobierno porteño Horacio Rodríguez Larreta va a hacer uso de la mayoría dentro del recinto para modificar el Código Contravencional de la Ciudad. Como adelantó Revista Qué en su edición #200 luego de la sanción se prohibirá la actividad de cuidacoches y limiavidrios. Desde el oficialismo explicaron a este medio que la necesidad principal es la de continuar con la política pública que viene realizando el Poder Ejecutivo en cuestiones de género; y en ese sentido buscan trabajar sobre lo que no se ve y lo que sucede a diario, como el acoso callejero. “En el caso de la Ciudad son las mujeres quienes más sufren diferentes formas de acoso y violencia al transitar las calles y al viajar en transporte público”, argumenta la iniciativa. 

La modificación propone una interpretación más abarcativa de la contravención hacia los cuidacoches, entendiendo que la acción comprende tanto a “quienes brindan indicaciones, cuidan vehículos, reservan lugares o aplican cualquier otro método tanto de forma gratuita, onerosa o a cambio de una retribución voluntaria”. También agrava las sanciones de multa e incorpora la posibilidad de aplicar arresto de uno a cinco días. Mientras que la inclusión de la figura del limpiavidrios propone la incorporación de “la limpieza de vidrios de cualquier tipo de automotor en la vía pública” como figura contravencional, para ello aplica los agravantes bajo las mismas causales que en el caso de los trapitos.

El cambio tserá en la redacción del artículo N° 79 del Código de Contravenciones, que plantea sancionar con uno o dos días de trabajos de utilidad pública o multa a quien "exige retribución por el estacionamiento o cuidado de vehículos en la vía pública sin autorización legal". Lo que sucede con ese artículo era cómo demostrar que el trapito había exigido plata y no una propina, porque esto obligaba a acumular declaraciones de testigos, filmaciones y otras pruebas. Así, casi ninguna causa progresaba. A partir de la semana que viene, cuando se sancione la modificación al código, pasará a ser el N° 84 quedará redactado: "Quien sin autorización legal ofrece o presta en la vía pública, de manera directa o indirecta, servicios de estacionamiento, cuidado de coches o limpieza de vidrios, es sancionado con uno a cinco días de utilidad pública o multa de 150 a 1.500 Unidades Fijas". Es decir que con el solo hecho de ofrecer el servicio se podrá penalizar.

La sanción económica hoy sería de entre $ 2.677,5 y $ 26.755, porque la Unidad Fija está determinada en $ 17,85. Pero como varía según el precio de la nafta, a futuro podría ser más cara.

Además, si se comprobara que los trapitos formaban parte de una organización, como por ejemplo ser parte de una "barra brava", la sanción se eleva a entre 5 y 15 días de arresto, y se cuadruplican para los cabecillas de la banda. 

Esa misma sanción agravada corresponderá si los cuidacoches son hallados en los parques durante los fines de semana, o en un perímetro de hasta 30 cuadras a la redonda de los estadios cuando se desarrolle un evento deportivo o un espectáculo, entre las tres horas previas o las dos posteriores al recital o el partido de fútbol. Además, si se probara la vinculación de los cuidacoches con una entidad deportiva, los dirigentes vinculados podrían afrontar una sanción de 5.000 a 15.000 Unidades Fijas, y podría clausurarse el club. 

Comentá la nota