Elisa Carrió, precandidata a primera diputada por Ciudad, estuvo hoy en Santa Fe con el jefe de gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, apuntalando el cierre de campaña de los candidatos a diputados locales de Cambiemos. La diputada chaqueña se mostró confiada y afirmó que las elecciones primarias del domingo constituirán “el primer paso para una gran victoria en octubre”.

“Venimos maravillosamente bien”, dijo Carrió a Télam sobre el desempeño que aguarda de la coalición oficialista en las PASO del próximo domingo, al acompañar a los durante una raviolada en el parador de una ruta y una posterior visita a la Virgen de San Nicolás. Además, la diputada aseguró que “en Santa Fe nos va a ir mucho mejor de lo que todos creen”, con la lista de diputados que encabeza el radical Albor “Niky” Cantard.

Tras el cierre porteño de la campaña de Cambiemos, Carrió llegó esta tarde hasta un parador ubicado en la Ruta 9, a la altura de la localidad santafesina de Fighiera, donde se comen “los mejores ravioles de la Argentina”, aseguró. La parlamentaria encabezó una raviolada de la que también participaron el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, el vicejefe Diego Santilli, y legisladores nacionales y porteños de la Coalición Cívica (CC) y de Cambiemos.

Si bien el paso de Carrió por esta provincia tuvo por objetivo sacarse la foto con los candidatos locales de Cambiemos, Luciano Laspina (PRO) y Lucila Lehman (Espacio Carrió), subsidiariamente cumplió otros fines, de carácter ritual. “Antes de todas las elecciones voy a la Virgen de San Nicolás y vengo a comer ravioles a Fighiera”, dijo la chaqueña, y apuntó que además está “acompañando a los candidatos a diputados nacionales por Santa Fe”.

Carrió dijo sentirse “muy contenta y muy feliz” por la tarea cumplida durante la campaña, “pero siempre pidiendo a Dios por la Nación”. “Estoy acompañando a los candidatos a diputados, porque tenemos que ganar Santa Fe”, sostuvo la líder de la CC sobre la lista que encabeza Cantard, quien por razones de agenda no llegó a la raviolada.

Adelantó que tras el almuerzo en el parador de la ruta con el que cierra cada campaña, cumplirá su segundo ritual electoral: visitar a la Virgen de San Nicolás, de la que es devota. “Ahora vamos todos, los quiero llevar a los agnósticos”, bromeó sobre sus socios del PRO y dirigentes de su propia fuerza política.

También se acercó a la dirigente Carlos Mariani, el jefe comunal de Fighiera, el pueblo en cuya jurisdicción está ubicado el parador, quien abrió sus brazos para saludarla. “¡Acá está Mariani!, este me traicionó, era mi candidato en el 2007, y ahora sos de nuevo”, le dijo Carrió para el martirio del jefe comunal, que se sonrojó y se tomó una foto.

El diputado y candidato a renovar su banca, Laspina, consideró que “es un lujo” cerrar la campaña con la presencia de Lilita. “Tenemos mucha esperanza, la gente no quiere volver al pasado y quiere seguir apostando por este cambio que ha empezado lentamente, pero que está empezando a dar frutos”, dijo a esta agencia. En esa línea, agregó que “la gente sabe que éste es el camino, que quiere estar mejor, que no hay que repetir los errores del pasado, y que hay que trabajar fuerte para que la Argentina salga adelante”.