Por Blanca Ruiz

Según ha destacado el presidente de Cáritas, Rafael del Río, los “datos de esta memoria son las huellas que las Cáritas han dejado en su afán por practicar la justicia”.

“Cáritas, que es la Iglesia en su ejercicio de la caridad, tienen una vocación muy definida, llegar hasta donde no llega nadie en el servicio de los últimos”, apuntó del Río.

Según precisó Sebastián Mora, secretario general de la Confederación, durante el pasado ejercicio a lo largo de 2014, Cáritas atendió a 4,3 millones de personas. Aproximadamente la mitad de ellos en España y el resto en el exterior.

En ese sentido Mora ha explicado que el 73 por ciento de las personas que piden ayudas a Cáritas son ciudadanos españoles, gran parte nacidos en el extranjero, pero nacionalizados en el país. Asimismo, el 53 por ciento de los solicitantes son parejas con hijos y el 19,3 por ciento son mujeres con hijos a su cargo.

Otro dato es que el 24,9 por ciento de los hogares que atiende Cáritas se encuentran en situación de “pobreza severa”.

Asimismo, el 53 por ciento de los que piden ayudas son hogares donde alguno de sus miembros está trabajando. Mora considera este dato significativo porque demuestra “la precarización del mercado laboral”. “Tener un empleo no ofrece suficiente protección ante el impacto de la pobreza o la exclusión social”, por lo que pidió un refuerzo de las políticas sociales en España.

El secretario general de Cáritas también recordó que de cara a las próximas elecciones generales, la Confederación ha presentado algunas propuestas, como un decálogo de medidas para “contribuir a la construcción de una sociedad cohesionada, justa y fraterna, a partir de la

realidad de las personas en situación de mayor vulnerabilidad a las que acompañamos”.

“Como en citas electorales anteriores, Cáritas tiene la intención de presentar sus propuestas al conjunto de los representantes políticos y los agentes sociales”, informó.