La repercusión de la denuncia sobre los sacerdotes Corbacho y Corradi, detenidos en Mendoza por el abuso sexual de niños sordomudos, llegó hasta La Plata. Ya se conoció el testimonio de una víctima. Aguer llama a denunciar los casos y el arzobispado defiende a la institución: "No se difunde la enorme cantidad de sacerdotes que no son pedófilos ni violan a ningún chico”.

Los sacerdotes Horacio Corbacho y Nicolás Corradi, detenidos en Mendoza por el abuso sexual de niños sordomudos, son sospechosos de haber cometido el mismo delito con al menos dos personas cuando se desempeñaban en la ciudad de La Plata y solían contactar por las redes sociales a menores de edad. En estos días se conoció el testimonio de uno de los abusados que vivía en el Instituto Próvolo mientras que la Justicia pedirá al arzobispado platense, encabezado por Héctor Aguer, informes sobre los sacerdotes y explicaciones de por qué fueron trasladados.

En ese marco, Aguer emitió dos comunicados solicitando “a quienes tengan noticia fehaciente de atropellos cometidos en el Instituto Próvolo de La Plata, se acerquen a realizar las denuncias pertinentes ante el Vicario de Justicia de este Arzobispado, Pbro. Dr. Javier Fronza, a fin de proceder a las instancias canónicas pertinentes”.

Al respecto, el Padre Cristian, del área de prensa del arzobispado, aseguró a Infoplatenseque “no hay denuncia concreta de nadie”. Y agregó: “La Iglesia lamenta profundamente con dolor, bronca y angustia, lo que ha sucedido. Los pecados y las depravaciones de los hijos de la Iglesia manchan” a la institución.

“Pero la Iglesia está llena de santos y pecadores; para eso la construyó Dios. Pero no se difunde la enorme cantidad de sacerdotes que no son pedófilos ni violan a ningún chico”, continuó. Y concluyó: “Tenemos que aplicar tolerancia cero para estos actos”.