En la noche del 9 al 10 de noviembre de 1938, hace 74 años, hordas nazis llevaron a cabo el pogrom denominado “Kristallnacht”, popularmente conocido en castellano como “La noche de los cristales rotos”. Estos hechos, realizados con la anuencia de las autoridades alemanas y austríacas y ante la total inacción policial, dieron inicio a la Shoá, el exterminio de 6 millones de judíos, diez meses antes del estallido de la Segunda Guerra Mundial.

En relación al acto, Claudio Avruj, secretario de Derechos Humanos y Pluralismo Cultural de la Nación, manifestó a Iton Gadol: “Es importante dar este paso, lo hablamos con la B’nai B’rit, que fue la que históricamente estuvo a cargo del evento. Había un reclamo histórico de la comunidad judía de que el Estado Argentino asuma el acompañamiento de todos los actos que tienen que ver con el Holocausto”.

“Desde hace años vengo trabajando porque todas las comunidades deben abrir sus puertas y dejar de hacer sus actividades intramuros, para poder compartirlas con toda la sociedad. Esa es la única manera de que toda la sociedad se apropie de los temas que son propios y hacen al bien común. Teniendo una Plaza de la Shoá con el monumento nacional de recordación a las víctimas, con el Gobierno entendíamos que este era el escenario natural para que empiece a convertirse en el epicentro de las actividades conmemorativas. Hoy hay que involucrar a las nuevas generaciones y a un gran segmento de la sociedad. La Iglesia va a estar acompañando este evento en la Plaza de la Shoá”, agregó.

La invitación es “para recordar junto a la comunidad judía uno de los hechos más aberrantes de la humanidad y reafirmar el compromiso con el respeto a los derechos humanos para evitar que estas expresiones de odio y violencia se repitan”.

El acto es organizado por la Presidencia de la Nación, el ministerio de Cultura de la Nación, B’nai B’rit Argentina, la AMIA, la DAIA, FACCMA, Generaciones de la Shoá en Argentina y el Museo del Holocausto de Buenos Aires.