Aborto legal desde jardín de infantes

Aborto legal desde jardín de infantes

Habrá "para todos y todas" enseñanza del aborto como derecho. Con o sin consentimiento de los padres. Esta postura "invisibiliza" al niño para convertirlo en apenas un saco de células amontonadas. 

 

PorRodrigo Agrelo* y María Amelia Moscoso**

Sí, señor lector. Será así, como usted lo ha leído en el título de esta nota. En caso de sancionarse la ley de legalización del aborto, desde 2019, en todos los colegios del país, jardines de infantes, primarios y secundarios, públicos o privados, nuestros chicos recibirán “educación sexual integral” que incluya la enseñanza del aborto como un derecho.

Con un lenguaje críptico, el artículo 19 del proyecto de ley que debate el Senado establece claramente que la Nación, las provincias y los municipios deberán capacitar a sus profesionales de la salud en perspectiva de género, en especial en lo referido a la atención de las mujeres “que deseen realizar una interrupción voluntaria del embarazo en los términos” de la ley.

Sin respeto

 

A continuación, el proyecto ordena que “deben incluirse los contenidos educativos respectivos en la currícula obligatoria de todos los niveles educativos, independientemente de la modalidad, entorno o ámbito de las distintas instituciones educativas, sean estas de gestión pública o privada, lo que deberá hacerse efectivo en todo el territorio nacional a partir del próximo ciclo lectivo”. Y agrega: “en todo el sistema educativo sin excepción”.

 

Es decir, habrá “para todos y todas” enseñanza del aborto como derecho. Con o sin consentimiento de los padres. Sin mirar si los docentes obligados a enseñarlos pueden ejercer la objeción de conciencia en caso de que dichos conceptos hieran sus valores más profundos. Sin considerar que existen escuelas que fundan sus principios en la protección del derecho a la vida desde la concepción. Sin respeto alguno al hecho de que hay muchos padres que consideran que debe respetarse toda vida. Será una imposición de unos pocos sobre el resto de la sociedad.

De tal modo, quienes permanecen indiferentes a la sanción de esta ley, porque abortar no está en sus planes personales, deben saber que todos los niños del país, sus hijos y sus nietos incluidos, serán enseñados de la siguiente forma: el aborto es un derecho y así deberán aprenderlo si quieren aprobar la materia. Y los docentes, enseñarlo, porque si no violarán la ley, poniendo en riesgo su fuente de trabajo.

La perspectiva de género, cuya doctrina se invoca para fundar esta ley, es hija de la ideología de género. Esta refiere al aborto como “interrupción voluntaria del embarazo” por considerar que los seres humanos somos sólo una construcción sociocultural, no biológico-cultural.

Invisibilizados

Lo biológico es postergado de un modo displicente. Dicha ideología pondera de forma exagerada la autodeterminación de las personas, al punto que sobrepone el derecho a elegir de la madre por sobre la existencia de su hijo. Esta postura “invisibiliza” al niño para convertirlo en apenas un saco de células amontonadas.

Si este proyecto termina siendo ley de la Nación, se dará la siguiente paradoja: mientras en clase de Formación Ciudadana nuestros chicos serán educados en la idea de que “el derecho de uno termina cuando empieza el derecho del otro”, en la de Educación Sexual deberán saber que el derecho a elegir no tiene límite, aun si se trata de un niño indefenso. Abortar será un derecho y deberán aprenderlo. Lo dirá la ley.

Nuestro Código Civil y Comercial, en su artículo 638, establece el instituto de la responsabilidad parental, al que se define como “el conjunto de deberes y derechos que corresponden a los progenitores sobre la persona y los bienes del hijo, para su protección, desarrollo y formación integral mientras sea menor de edad y no se haya emancipado”.

Será entonces el Estado, a través del sistema educativo, el que se encargue de “formar integralmente” a nuestros hijos menores de edad, imponiéndose sobre los padres, quienes seremos desplazados en el ejercicio de nuestro derecho-obligación que surge de la responsabilidad parental. Habrá un Gran Hermano encargado de formar a nuestros hijos en lugar de nosotros.

Todo parece de ciencia ficción, pero pronto será una triste realidad si los senadores de la Nación, incluidos los tres de Córdoba, deciden votar tamaña ley.

 * Presidente y ** coordinadora del Portal de Belén, Córdoba

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